Cuatro años después, ni Solbes ni Zapatero quieren la responsabilidad exclusiva de no haber sabido ver la crisis económica que, desde finales de 2007, ya estaba presente en España y ante la cual el Gobierno del Partido Socialista respondió tarde y muy mal. Inició el 'ajuste de cuentas' el exministro de Economía Pedro Solbes, quien presenta sus memorias este martes y asegura que a finales de enero de 2009 un documento de propuestas para afrontar la situación elaborado por el exministro de economía fue calificado de "inaceptable" por Zapatero por lo que, añade Solbes, "interpreté sus palabras como una clara negativa a lo que yo le proponía". Según Solbes, las palabras exactas del primer ministro español fueron "Pedro, este documento es inaceptable. Lo que propones lleva implícitas dos huelgas generales".
"Era evidente para mí que desde ese momento mi presencia en el Gobierno prácticamente había terminado", afirma Pedro Solbes, quien se califica ahora como "un miembro del Gobierno incómodo para él y la situación era cada vez más enojosa para mí".
Sin embargo, José Luis Rodríguez Zapatero ha respondido: en declaraciones a 'El Mundo', el leonés dice que "no recuerda ningún plan con reformas acuciantes que le planteara Solbes en esas fechas", a pesar de que ZP se confiesa una persona con muy buena memoria. Tan intrigado está Zapatero que ha encargado a su secretario personal que revise el archivo de Moncloa donde se conservan las cartas, correos electrónicos y documentos entregados en mano al jefe del Gobierno.
Los colaboradores de Zapatero no se creen que si el documento era tan importante y fue el principio del fin de Solbes como ministro, "como es posible que no se entregara de una manera más formal o que exista un registro o constancia de ello en Moncloa".
En el libro, Solbes asegura que ya desde 2007 veía "nubarrones" en la economía española, pero que el hecho definitivo, que fue la caída de Lehman Brothers en octubre de 2008, no le mereció una respuesta hasta enero de 2009.