El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha asegurado que las pensiones "eran una prioridad antes y lo siguen siendo ahora", por lo que ha abogado por trabajar en una reforma para mejorar el sistema y mantenerlo en el futuro. Durante su intervención en el Pleno del Senado de este martes, ante una pregunta del senador socialista Marcelino Iglesias, ha defendido que él no ha congelado las pensiones, "pues eso se ha hecho en España sólo una vez y fue en el año 2011".
Según el presidente del Ejecutivo, la mayoría de los pensionistas ganará este año poder adquisitivo. La inflación estará este año alrededor del 1%, "lo que sería bueno para las pensiones, porque el Gobierno no tendría que tomar ninguna decisión". El 76% de las pensiones subirán un 2%.
El presidente ha explicado que, con el objetivo de mantener la sostenibilidad del sistema de pensiones en el futuro, se ha optado por crear un grupo de expertos para que haga una propuesta "que después se llevará al Pacto de Toledo para discutirla con los grupos parlamentarios". "Es ahí donde esperamos tener su apoyo, pues este es un tema fundamental en España", ha indicado Rajoy a Iglesias.
Para el senador del PSOE, la intención del Gobierno de subir las pensiones "estaba llena de trucos, pues después de aumentarlas un 1%, acometieron una subida de impuestos, implantaron el copago sanitario, etc., lo que ha hecho que esa subida se tradujese en una pérdida del 10% del poder adquisitivo de muchos pensionistas".
Rajoy ha destacado que España debe tener "plena conciencia" de que la salud financiera del sistema de pensiones "no depende de la voluntad, sino que requiere una gestión eficaz y responsable de los recursos que hay". En este sentido, ha recordado que las pensiones se pagan con las cotizaciones sociales, "y desde el año 2007, estás se han reducido en un 17%, mientras que el número de pensionistas se ha incrementado en más de 600.000 personas".
"Por eso, hay que abordar esta reforma del sistema, porque no hacerlo sería una insensatez", ha recalcado el presidente. El jefe del Ejecutivo ha valorado que el Gobierno ya ha tomado dos decisiones al respecto, la separación de fuentes de la Seguridad Social y la aprobación de la ley contra el empleo irregular y el fraude al sistema.
Según Rajoy, el reto es garantizar el futuro del sistema, aunque ha avanzado que de momento el Gobierno no ha hablando sobre el tema a la espera de ese informe del comité de expertos, "pero cuando esté lista, se debatirá con todos los grupos".
El déficit, el culpable de las medidas "no previstas"
Asimismo, Mariano Rajoy ha insistido en que el objetivo de su legislatura es crecer "y, a partir de ahí, crear empleo y mejorar el bienestar de los españoles", después de que Marcelino Iglesias le acusase de haber abandonado sus compromisos electorales. "Los objetivos se mantienen, pero para lograrlos hay que corregir los profundos desequilibrios que tiene la economía española, para lo que hemos trabajado durante este año y medio y seguiremos haciéndolo en el futuro", ha aseverado.
El presidente ha subrayado que existe un "tema capital, que es bajar el déficit", y ha asegurado que eso fue lo que obligó al Ejecutivo a tomar medidas "no previstas", aunque ha remachado que "peor hubiera sido no tomarlas".
Disposición para pactar con el PSOE
Además, ha insistido en que está dispuesto a hablar con el líder de los socialistas, Alfredo Pérez Rubalcaba, para llevar una posición común ante la reunión del Consejo Europeo de finales de junio. Durante su respuesta a una pregunta del senador del PSC José Montilla, Rajoy ha confiado en que en esa cumbre se pueda hablar de cómo ayudar a las pymes, de fomentar el empleo juvenil y de impulsar una mayor integración, sobre todo la unión bancaria.
El presidente ha recordado que en el primer Consejo Europeo en el que estuvo presente sólo se hablaba de austeridad, de reducción del déficit y de consolidación fiscal.