España

Los policías de Madrid denuncian que carecen de sistemas para detectar drogas

El Ayuntamiento sólo ha hecho en el último año 646 pruebas con la unidad especial de atestados, de los que un 49% ha dado positivo.

Los policías municipales de Madrid no tienen los suficientes aparatos para realizar el test de drogas a los conductores que se sospecha han consumido estupefacientes. Las unidades de distrito están dotadas de modernos etilómetros para las pruebas de consumo de alcohol. De hecho, se montan controles constantemente en muchos puntos de Madrid.

Estos últimos días, coincidiendo con la campaña de la Dirección General de Tráfico, se han realizado cientos de pruebas en las calles de la ciudad. Pero ninguna de estas unidades tiene los tets de drogas que deben ser solicitados a las unidades de atestados.

El portavoz de CSIT-Unión Profesional, José Horcajo, ha solicitado a los responsables policiales que se adquieran más “Quantisales”, la prueba homologada legalmente, que permite conocer si una persona ha consumido drogas o no. El anterior equipo municipal compró un gran número de material para hacer el muestreo y detectar si un conductor ha tomado estupefacientes, pero compró pocos de las pruebas homologadas.

La prueba del “Quantisales” tiene valor en los juzgados, mientras el sistema de muestreo no es aceptado como prueba

En caso de dar positivo con el primer test se debe pasar a la prueba del “Quantisales” que tiene un bastoncillo para recoger la saliva y una probeta con líquidos con conservantes. Este bastoncillo es analizado luego en el laboratorio. Este sistema está considerado como la prueba pericial correcta y tiene valor en los juzgados, mientras el sistema de muestreo no es aceptado como prueba.

CSIT señala que cuando creen que un conductor ha consumido estupefacientes tienen que llamar a una unidad de atestados para que acuda a realizar los análisis. En muchas ocasiones los agentes de atestados tardan mucho por estar en otros cometidos. Los policías pueden pedir a los conductores que se sometan a un análisis de sangre, a lo que se suele negar el ciudadano. Se puede solicitar entonces al juzgado la realización de este análisis de sangre. Pero muchos jueces rechazan esta petición con lo cual una persona bajo los efectos de las drogas puede volver a conducir sin problemas.

CSIT-Unión Profesional cree que los responsables de la Policía Municipal deben dotar de este material para detectar drogas a todas las unidades. Asimismo se quejan de que hay poco personal en el laboratorio municipal que se ocupa del análisis de saliva recogida en los “Quantisales”.

Los resultados

Hace unos días, el Ayuntamiento de Madrid difundió un comunicado en el que decía que en el primer año de implantación de los controles de droga un 49% de las pruebas han dado positivas. “La utilización de los dispositivos de detección de droga –señalaba- ha simplificado el operativo de la Policía Municipal de Madrid en los controles preventivos, así como en los que se realizan con motivo de una infracción o por la implicación del conductor en un accidente de tráfico, permitiendo combinar las pruebas de consumo de alcohol y droga de manera inmediata”.

El comunicado señalaba que “antes de usar los actuales dispositivos, los controles de droga se realizaban cuando concurría algún tipo de delito y además se observaban síntomas de haber consumido alguna sustancia, lo que obligaba a la Policía a trasladar al infractor a un centro sanitario para extraerle sangre y remitirla al Instituto Nacional de Toxicología”.

El kit de detección utilizado (“Quantisales”) es rápido y cómodo, ya que la muestra de saliva necesaria para la prueba es inferior a la que requieren otros sistemas. El Ayuntamiento señala que simplifica el trabajo de los agentes municipales y causa menos molestias a los ciudadanos sometidos a estos controles.

El protocolo policial para la detección de alcohol o drogas a los conductores en los controles se realiza de manera combinada, según informa el Ayuntamiento. Primero se les practica la prueba de alcoholemia habitual por aire aspirado, y si ésta resulta negativa pero el conductor presenta síntomas de haber consumido otro tipo de sustancia, se realiza la prueba de drogas. En total, en un año se han realizado 646 de estas pruebas, de las que el 49% han resultado positivas.

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