El secretario de Estado para las Administraciones Territoriales, Roberto Bermúdez de Castro, reveló esta tarde a los grupos parlamentarios el Senado que el 21-D en Cataluña habrá "una patrulla de Policía en cada colegio electoral", alrededor de 2.000, para garantizar la normalidad en las 8.240 mesas repartidas por toda la geografía.
Normalmente, en cualquier proceso electoral la ratio policial es de una patrulla por cada dos colegios, pero las especiales circunstancias que concurren en este caso ha hecho aconsejable velar por la seguridad y evitar así sospechas como las que intenta expandir ERC, que ha anunciado que movilizará a 16.000 interventores y apoderados para evitar un "pucherazo".
Bermúdez de Castro ha señalado que la aplicación del 155 en Cataluña se está haciendo con proporcionalidad y, en ningún momento, ha habido vacíos de poder o disfunciones que pudiesen afectar a la Administración o a los ciudadanos. Y ha subrayado los resultados "tangibles" y cómo la seguridad jurídica está influyendo en la mejora económica.
Cuando se cumplen los 38 días de aplicación del 155, el encargado del Ejecutivo para intervenir la Generalitat ha destacado que todo está transcurriendo según los objetivos planteados: se ha restablecido el orden constitucional, "se trabaja en recuperar la estabilidad y el interés general" y los preparativos para las elecciones del 21D se están realizando con "normalidad".
A modo de ejemplo y como parte de esos "efectos tangibles", Bermúdez de Castro ha puesto de ejemplo la convocatoria de concurso público para el ingreso en el acceso a la función pública con nuevas 2.000 plazas en el ámbito de la educación.
El secretario de Estado se ha referido al viaje de la coordinadora interdepartamental y candidata de Junts per Catalunya, Elsa Artadi, a Bruselas para despachar con Carles Puigdemont. Roberto Bermúdez de Castro ha señalado que "se lo pagó ella de su bolsillo" y que el Gobierno no va a cesar a nadie por lo que haga en sus días "de asuntos propios" que pidió. Sí ironizó con el hecho de que Artadi dice que está en contra del 155 "pero su labor es imprescindible para la aplicación del mismo; es el problema de quienes dicen una cosa dentro y otra fuera".