En septiembre 1972, cuando la dictadura franquista encaraba sus últimos años, la precariedad y los despidos en la factoría que Citröen tenía en Vigo llevaron al paro a 300 trabajadores. Como una goma elástica, la respuesta de los trabajadores no se hizo esperar, y 20.000 obreros comenzaron una huelga que todavía se recuerda en la ría.
Las manifestaciones se multiplicaron por diversas ciudades españolas, llegando a tener réplica en Madrid y en Barcelona. Esta historia nos lleva a Santiago de Compostela, donde los estudiantes se atrincheraron en la universidad para mostrar su solidaridad con los padres de familia que se veían en la calle.
Las detenciones de varios estudiantes por parte de los grises movilizaron a la comunidad educativa. Entre los arrestados estaba el actual alcalde de Vigo, el socialista Abel Caballero, entonces estudiante de Economía en la Universidad de Santiago. Tras su puesta en libertad, el regidor reelecto hace unos días contrajo una deuda que él dice que ha saldado y otros lo niegan. Estos son los hechos.
En el curso 71-72, en Navidades, Luis Suárez de Llanos, entonces Decano de la Facultad de Economía, decidió marcharse en navidades a visitar varias universidades norteamericanas. Su puesto le es delegado, de manera interina, el que más tarde se convertiría en líder del nacionalismo gallego, Xosé Manuel Beiras, que por entonces era vicedecano y catedrático de economía en el centro donde estudiaba Caballero.
El histórico político del BNG recuerda en una entrevista realizada por el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, cómo la ventana de su despacho daba a una plaza donde los ‘grises’ tenían la comisaría. “Monté piquetes de estudiantes para vigilar los movimientos de la policía. Cuando salían cerrábamos la universidad, donde se daban mítines y conferencias No consiguieron entrar”, recuerda Beiras en la conversación.
Cuando los alumnos fueron detenidos, Beiras fue el primero en presentarse en las dependencias policiales para pagar las fianzas de los chavales. “Multas de 25.000 pesetas, cuando yo cobraba 30 mil y pico. Hicimos una colecta, pero no daba y tuve que poner de mi bolsillo. Les tuve que pedir a mis padres, porque me quedé sin sueldo”, recuerda.
En la entrevista en La Tuerka, Pablo Iglesias le recuerda que los estudiantes detenidos le devolvieron el dinero que tuvo que abonar. Todos menos uno. Tras unas risdas recordar cómo se sucedieron los acontecimientos, Beiras desvela el nombre: “Abel Caballero”.
"Le pagué con dinero de mi cartilla de ahorros"
El alcalde de Vigo se defiende de las acusaciones: “Le devolví el dinero en su casa, durante una comida, sentados a la mesa y con su mujer delante. Lo saqué de mi cartilla de ahorro de Caja Postal. Beiras lo ha dicho muchas veces y es producto de su idea fantasiosa".
Los personajes de esta historia no quieren rememorar lo ocurrido. Beiras, que fue profesor de Caballero, siempre lo recuerda como un gran alumno, como una persona brillante. Pero de la deuda no dice nada. Retirado ya de la vida pública, y poco amigo de los periodistas, no ha querido hacer declaraciones sobre el asunto. Caballero tampoco lo ha hecho directamente. Ha respondido a Vozpópuli a través de un mail enviado por su gabinete de prensa.