La exministra de Cultura y actual secretaria de Igualdad del PSOE, Carmen Calvo, está subiendo enteros a pasos agigantados en la Ejecutiva de Pedro Sánchez desde el pasado verano; es portavoz para todo -después de sonoras salidas de tono del portavoz oficial y alcalde de Valladolid, Óscar Puente- y no son pocos en el partido los que ya la ven como próxima cabeza de cartel a las elecciones europeas de mayo de 2019.
Aunque el entorno del secretario general guarda silencio, porque resta casi un año para tomar la decisión, son varios los consultados por Vozpópuli en la Dirección Federal, y también entre eurodiputados y diputados al Congreso, que analizan lo sucedido en torno a la fallida candidatura de Elena Valenciano para presidir el Grupo Socialista Europeo (GSE) como un anticipo de que Calvo pudiera ser cartel europeo el año próximo.
De hecho, Sánchez, que barajó comparecer este lunes para anunciar la proposición de ley contra la brecha salarial entre hombres y mujeres, finalmente dejó a la secretaria de Igualdad ese papel, consciente de que la mayoría de las preguntas de la rueda de prensa iban a centrarse en su "no" a Valenciano para sustituir al italiano Gianni Pitella al frente del GSE por solo nueve meses.
La exministra fue la encargada de explicar este lunes que Sánchez quiere el cabeza de cartel europeo en 2019 sea "una mujer" y además que presida el Grupo Socialista Europeo en los siguientes cinco años
Lo curioso es que ella fue la encargada de explicar que el líder socialista -así se lo había transmitido antes- ya ha decidido que la lista la encabece "una mujer", como ocurrió con Valenciano en 2014, y que sea esa persona la que presida el GSE durante los cinco años siguientes.
El grupo de eurodiputados socialistas españoles va a ser de los más numerosos, dijo la ex ministra de Cultura en el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, y "tenemos que aspirar a la presidencia la legislatura que viene, que es cuando toca y cuando hay que poner toda la carne en el asador", añadió en alusión a que no es conveniente pelear por un cargo para nueve meses; sobre todo, cuando el líder parlamentario del todopoderoso SPD alemán, Udo Bullmann, ha mostrado su interés.
Una afirmación que ha desatado la especulación sobre el futuro de Carmen Calvo en tanto que la actual jefa de la delegación de eurodiputados del PSOE, Iratxe García, también Secretaria de Relaciones con la UE en la Ejecutiva, habría mostrado en privado su deseo de volver a la política nacional después de quince años en el Parlamento Europeo -está en el Parlamento de Estrasburgo desde 2004-.
Iratxe García le dijo el pasado jueves a Valenciano, antes de desatarse toda la tormenta mediática de los últimos días, que Ferraz había decidido no apoyarla como sustituta de Pitella para solo nueve meses
Precisamente, fue García quien el pasado jueves transmitió a Elena Valenciano la decisión de Ferraz de no apoyarla en su candidatura a presidir el GSE en sustitución de Pitella, como la habían propuesto diputados de varios países -laboristas británicos, el lobby feminista y países del sur- que no quieren ser asociados constantemente a la gran coalición alemana en el año que resta hasta las elecciones de 2019 porque puede pasar factura en las urnas.
Según fuentes del entorno de Valenciano, su nombre surgió de forma espontánea entre los 190 eurodiputados de izquierda porque es una histórica de la política europea que ocupó un escaño durante dos legislaturas -1999 y 2004- antes de volver a España en las elecciones generales de 2008. Luego regresó de nuevo a Estrasburgo como cabeza de cartel frente a Miguel Arias Cañete (PP) en 2014, un mes antes de la dimisión de Alfredo Pérez Rubalcaba al frente del PSOE, con quien llegó a ocupar el cargo de vicesecretaria general.
