El Partido Popular confía en que no se repitan las generales en noviembre. Temen que una repetición electoral impulse al PSOE por encima de los 150 escaños, según algunos trackings que se manejan en Génova. También el PP subiría, a costa de Vox y de Cs, pero no tanto.
"No creo que haya elecciones, al final Pedro Sánchez cerrará con Podemos su acuerdo, lo que estaba previsto", comentaba Teodoro García Egea, secretario general de los populares este martes en esRadio. Pablo Casado, por su parte, repite insistentemente estos días que su formación no desea elecciones, pero tampoco las teme. "Estamos preparados, tenemos la maquinaria engrasada", suele comentar en sus intervenciones.
Una repetición electoral, en el caso de que Sánchez no logre atar un acuerdo con Iglesias, resultaría algo precipitado para los populares. Ya les pasó en el 28-A. Casado prácticamente acababa de aterrizar en el puente de mando del partido y no había tenido tiempo para organizar su estructura. El resultado fue desastroso. Ahora está algo mejor, ya ha tomado decisiones y ha movido algunas piezas. Pero falta mucho por hacer. En los planes de Casado figura llevar a cabo cambios en la estructura orgánica, tanto en Génova como en los grupos parlamentarios. Más adelante entrará en las organizaciones regionales.
El bipartidismo asciende
Los datos que se manejan en Génova son que el PP podría subir desde sus actuales 66 diputados hasta los 80, o alguno más, provenientes de Ciudadanos y de Vox. Una subida notable pero nada que ver con las cifras de tan sólo un año atrás. "Las dos marcas del bipartidismo saldríamos beneficiados con unos nuevos comicios, pero no es el escenario ideal para el PP", apuntan estas fuentes.
Los socialistas subirían algo más, debido al declinar de Podemos. No obstante, tampoco se piensa en el cuartel general de Génova que Sánchez lo tendrá muy fácil. "La movilización de la izquierda, si no logran formar Gobierno, sería muy débil, nada que ver con lo que ocurrió con las elecciones de la foto de Colón", añaden en círculos populares. Tampoco ahora el PSOE y sus estrategas de la Moncloa tendrían un 'trifachito' al que agarrarse. Ese efecto ya ha pasado. Con todo, las previsiones para noviembre auguran buenos datos para los socialistas si hay elecciones. Casado lo sabe y se tienta la ropa. A la espera.