El exministro de Justicia, Rafael Catalá, considera "muy ingrato y muy injusto" que las grabaciones filtradas de las conversaciones entre el excomisario José Manuel Villarejo y la ex secretaria general del PP María Dolores de Cospedal "contaminen una carrera política de treinta años".
En una entrevista en TVE, el actual secretario de Justicia y Administraciones Públicas del Partido Popular, que coincidió con Cospedal en el Gobierno de Mariano Rajoy liderando esta la cartera de Defensa, ha admitido "sensación de pena y tristeza" por la salida de la política de su compañera.
Cospedal ha dejado su puesto en la Ejecutiva del PP y su escaño en el Congreso de los Diputados tras desvelarse conversaciones que mantuvo con Villarejo --en prisión por presuntos delitos de pertenencia a organización criminal, cohecho, blanqueo de capitales, revelación de secretos y extorsión--, en las que le pedía investigar el papel de Javier Arenas en la fundación Asociación de Estudios Europeos.
Según entiende Catalá, la ex secretaria general del PP estaba "haciendo su trabajo, ordenando su casa", y, aunque el encuentro con Villarejo le pueda parecer "inadecuado a alguien", no se puede decir que "espiase a ningún compañero" porque se limitó a pedir información "sobre una fundación en la que participaba" el partido.
Cada lunes "daba la cara" en Génova
De esta manera, ha afirmado que comprende su marcha por el "compromiso con la transparencia del PP", pero ha insistido en que "se es injusto con Cospedal en el balance de su trayectoria". Ha recordado que ha estado en la cúpula de la formación en "una época muy difícil" con "casos de corrupción vergonzosos" y que "ella estaba cada lunes en la sede de Génova dando la cara".
En la entrevista también ha asegurado desconocer los supuestos pagos del Ministerio del Interior al chófer del extesorero 'popular' Luis Bárcenas. Preguntado por otros asuntos Catalá ha asegurado que es "normal" la gestión que ha hecho el Tribunal Supremo para decidir quién paga finalmente el impuesto sobre las hipotecas, y ha rechazado que la sentencia del Tribunal de Estrasburgo, que tacha de "injusto" el juicio sobre Arnaldo Otegi, "desacredite los millones de asuntos que cada día se resuelven con absoluta calidad".