El conseller de Acción Exterior de la Generalitat de Cataluña, Ernest Maragall, ha reabierto las oficinas diplomáticas cerradas hace un año por el Gobierno de Mariano Rajoy por la aplicación del artículo 155 de la Constitución.
"Tras un año de oscuridad, hoy empieza un periodo larguísimo de luz intensa y horizonte ancho, que quiere decir mucha presencia, mucho trabajo, con una ambición legítima", dijo Maragall a periodistas tras dar por reabierta la delegación catalana en Washington, la primera fuera de Europa.
Maragall entregó el liderazgo de esta representación diplomática a Victòria Alsina, que toma el relevo de Andrew Davis, el que fuera delegado de la Generalitat en Estados Unidos hasta su destitución hace un año. Alsina consideró el nombramiento un "orgullo" y dijo que su primera función será "recuperar la normalidad".
El conseller también señaló que Alsina y la delegación trabajarán "con la expectativa de que Cataluña cuente con un reconocimiento de su condición de país". "La agenda catalana está clara, en Washington es exactamente la misma que la agenda en Barcelona (...) No nos resignamos a ningún tipo de silencio", añadió.
Maragall explicó que esta agenda pasa en estos momentos por términos como "democracia y libertad", y que una de las funciones de la delegación será difundir la situación de los políticos independentistas que están presos.
"Esta situación afecta de pleno a las instituciones y a la sociedad catalana y sería absurdo que esto no estuviera presente en nuestra manera de representar a la sociedad catalana", afirmó. También dijo que la delegación tratará "de influir en todo lo que afecte a Cataluña" y que lo hará "con absoluta convicción".
Tono "amenazante" de Borrell
Del mismo modo, Maragall respondió a lo que consideró "el ruido" en "tono amenazante" del ministro español de Exteriores, Josep Borrell, sobre la acción exterior catalana, al afirmar que "ni nos interesa, ni nos afecta, ni nos va a cambiar lo que vamos haciendo aquí".
Maragall se reunió hoy con el congresista republicano Mario Díaz-Balart -que en marzo de 2017 ya recibió al ex presidente catalán Carles Puigdemont- y dijo que próximamente habrá nuevos contactos con miembros del Congreso y del Gobierno de EE.UU.
El conseller de Acción Exterior, que en los próximos días dejará su cargo para dedicarse a la campaña a la Alcaldía de Barcelona, también anunció que la semana que viene el Govern aprobará la apertura de seis nuevas delegaciones diplomáticas.
Se trata de representaciones en los países bálticos, en los países nórdicos, en Portugal, el Mediterráneo, Centroeuropa y los Balcanes.