La contundente posición de Ciudadanos frente al desafío independentista en Cataluña ha hecho que la formación centrista aumente considerablemente en número de afiliados en los últimos meses. Su persistencia en no hacer concesiones ni "pastelear" con los soberanistas, sus exigencias para impedir el 1-O, intervenir la autonomía y convocar elecciones anticipadas y su amplia presencia en la calle, abanderando las manifestaciones de la mayoría silenciosa a favor de la unidad de España, han surtido efecto. Además de haber subido tres puntos en intención de voto desde julio, según el último barómetro del CIS, también ha conseguido superar los 24.000 afiliados en plena crisis secesionista, indican fuentes de Cs.
Así, el crecimiento del partido de Albert Rivera en las encuestas de opinión también se hace visible a nivel de organización. En las primarias celebradas el pasado enero, fueron 20.065 las personas que participaron al tener derecho a ello por estar al corriente de pago de la cuota mensual (10 euros al mes, la más alta de los cuatro principales fuerzas parlamentarias). Ahora, esa cifra ha aumento en cerca de 4.000 adhesiones, según las fuentes citadas, que destacan un notable incremento entre el electorado más joven.
El CIS de octubre, publicado el pasado martes y realizado tras el referéndum de independencia del 1-O, sitúa a Ciudadanos a sólo un punto del sorpasso a Podemos, formación que siempre se ha marcado el objetivo de ser hegemónica en el sector de los más jóvenes. En dicho sondeo, Cs adelanta al partido morado y sus confluencias en voto directo y se coloca ya como primera fuerza entre los menores de 35 años.
El férreo marcaje de Ciudadanos a la gestión del Gobierno en Cataluña, reprochándole cualquier signo de debilidad o cualquier actitud de pasividad ante los separatistas, le ha permitido arañar al PP un 10% de sus votantes en las elecciones del 26-J, tal y como publicó el miércoles este diario en un análisis de las tripas del CIS. La formación centrista arrebata ya a los populares casi 800.000 apoyos de centro-derecha desde las pasadas generales, 300.000 de ellos en los últimos cuatro meses.
Ciudadanos, a sólo un punto del 'sorpasso' a Podemos en intención de voto, ya se coloca como primera fuerza entre los menores de 35 años
Esa postura vigilante es la que mostró este jueves la líder de Cs en Cataluña, Inés Arrimadas, quien aseguró que su formación no comparte la "alegría y la satisfacción" del Gobierno con la actuación policial de varios cuerpos policiales en la jornada de "huelga general" en Cataluña el pasado miércoles.
"No podemos compartir las felicitaciones que ha hecho el Gobierno de España y su representantes en Cataluña diciendo que había sido una jornada ejemplar y que se habían coordinado de forma ejemplar los diferentes cuerpos de seguridad", manifestó Arrimadas a la prensa tras visitar el eje comercial de Nou Barris del paseo Verdum de Barcelona, según informó Ep.
"Voluntad política"
La candidata de Ciudadanos a la Generalitat en los comicios del 21-D subrayó que el Ejecutivo de Mariano Rajoy "debería explicar qué es lo que hizo y por qué no funcionó el dispositivo". Además, insistió en que con "voluntad política" se podría haber garantizado a su juicio el correcto funcionamiento de los servicios públicos. El control de los Mossos d'Esquadra por parte del Ministerio de Interior (potestad que le otorga la aplicación del artículo 155 de la Constitución) también ha quedado en entredicho ante la inacción de la policía autonómica para frenar acciones violentas el 8-N.
Arrimadas negó que la jornada del miércoles fuese una huelga general porque no contaba con el apoyo de las centrales sindicales, sino que fue "un acto político". "Los trabajadores no tienen la culpa de las locuras de los soberanistas. Es lamentable cómo se vulneraron los derechos de los catalanes", lamentó la líder de Ciudadanos en Cataluña.