El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page, ha acusado hoy al Gobierno de Mariano Rajoy de intentar chantajear a los barones socialistas despejando el tema de la financiación a cambio de que éstos presionaran a la dirección del PSOE y conseguir el apoyo socialista a los presupuestos.
En una mesa redonda en el marco de la Escuela del Buen Gobierno del PSOE, en el que también han participado los presidentes de Aragón, Baleares y Extremadura, los barones socialistas se han mostrado pesimistas respecto a que en el corto plazo haya una reforma del sistema de financiación y han asegurado que el Gobierno de España carece de "voluntad política" para acometerla.
En su intervención, García Page ha sido rotundo y ha dejado muy claro que los presidentes autonómicos socialistas "no van a aceptar chantajes", ni del Gobierno ni del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro.
García Page ha insistido en que "todos los que estamos aquí hemos recibido mensajes permanentemente, por arriba y por abajo, para que presionáramos a la dirección del PSOE" y a cambio el Gobierno despejaba la negociación del nuevo modelo de financiación.
Más aportación estatal
El presidente de Aragón, Javier Lambán, ha explicado que para que un nuevo sistema tenga éxito necesita "más aportación de dinero" y ha dicho tener "serias dudas" de que el Ejecutivo quiera poner más recursos.
Lambán también ha lamentado que las comunidades autónomas se hayan lanzado a una carrera de rebaja de impuestos por razones electorales y ha asegurado que con esta política se está perdiendo legitimidad para reclamar al Gobierno una reforma.
Por su parte, la presidenta balear, Francina Armengol, ha subrayado que cada territorio tiene sus diferencias "y no pasa nada" y, por tanto, ese modelo exige respetar la singularidad y compensar a los territorios con un régimen especial.
El presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, ha admitido que será difícil que haya un nuevo modelo, pero habrá que intentarlo "en los próximos meses".
Y ha reconocido que cuando falte un año para las elecciones, "nadie va a meterse a negociar un modelo que tenga vencedores y vencidos" y ha pedido que se entre en un proceso de "mejorar lo que hay".
Además todos los barones han reprochado al Gobierno que no haya espacios autonómicos para la cooperación y quien legisla sobre competencias no habla con las autonomías.
Por eso, han considerado "ilógico" en la España democrática que el Gobierno sea incapaz de negociar, de ver en perspectiva y de buscar soluciones conjuntas.