El portazo de José María Aznar ha eclipsado el anuncio de la reforma de estatutos del PP para, entre otros objetivos, modificar el sistema de elección del presidente nacional y otros cargos de la formación. La propuesta presentada el lunes por Fernando Maíllo, vicesecretario de Organización, plantea un sistema de doble vuelta, en el que los militantes designarían tanto a los candidatos a presidente como a los delegados del congreso.
Esta fórmula, de ser aprobada en el cónclave de los populares del próximo mes de febrero, echaría por tierra las promesas de celebración de primarias que vienen efectuando desde hace meses tanto Cristina Cifuentes como Isabel Bonig, líderes del PP en Madrid y Comunidad Valenciana, respectivamente. En diferentes oportunidades, tanto la titular de la Gestora madrileña como la presidenta de los populares de la Comunidad Valenciana se han mostrado firmes defensoras de sustituir el actual sistema de compromisarios por el de ‘un militante, un voto’, tal y como funciona en otros partidos nacionales.
Cifuentes y Bonig, defensoras de sustituir el actual sistema de compromisarios
La dirección de Génova ha dispuesto cerrar el camino a las primarias, tanto en la elección de dirigentes a nivel nacional como regional y local. No parece que el Congreso Nacional vaya a rechazar esta iniciativa, consultada con gran número de dirigentes de la formación. Cifuentes y Bonig tenían la idea de que cada demarcación regional podría ensayar el sistema de designación de altos cargos que mejor se adapte a su criterio. Maíllo comentó en la rueda de prensa que la presidenta madrileña no había sido informada de esta novedad, que limita su capacidad de movimientos de cara a la celebración del congreso regional del PP de Madrid, regido ahora por una gestora desde la salida de Esperanza Aguirre. No hay lugar para las primarias en el futuro PP, subrayó el vicesecretario.
Un procedimiento obligatorio
La doble vuelta será el procedimiento obligatorio en todos los niveles de la organización territorial. El aparato de los populares llevará esta propuesta al Congreso Nacional y, en el caso de resultar aprobado por los más de 3.000 compromisarios elegidos el pasado fin de semana en toda España, se procederá a su adaptación y a su puesta en práctica en las asambleas regionales y locales que habrá de celebrar el PP en toda España antes del verano.
La doble vuelta será el procedimiento obligatorio en todos los niveles de la organización territorial
Cifuentes, Bonig, y otros líderes populares, como Esperanza Aguirre, han venido defendiendo las primarias como la vía más adecuada para promover la democratización interna y la participación de las bases. No va a poder ser, de acuerdo con los designios de Génova, donde se comenta que no habrá excepciones. La doble vuelta se implantará a nivel general, un sistema que la dirección del partido encuentra tan abierto y democrático como otros que funcionan en los países europeos.