El paro general convocado en Cataluña este jueves ha dejado varios enfrentamientos entre manifestantes y personas contrarias a la huelga. Uno de estos incidentes resalta sobre el resto porque ha sido una mujer embarazada, empleada de una tienda de móviles, la que ha respondido a un grupo CDR (Comités de Defensa de la República), que le instaba a que cerrara el local, en el municipio barcelonés de Terrasa.
DIRECTO https://t.co/eP04a8mxWq "Aquí termina su derecho. Vosotros no me pagáis el alquiler y yo tengo que pagar si cierro". El rifirrafe entre los CDR y la empleada de una tienda que no quería hacer huelga. Vídeo de Cristóbal Castro pic.twitter.com/coZO3EBu5r
— EL PAÍS (@el_pais) February 21, 2019
“Estoy embarazada. Aquí termina su derecho. Vosotros no me pagáis el alquiler. A mí Yoigo no me paga si yo cierro la tienda. Yo apoyo su causa, pero no así. Aquí pierden el derecho", les ha recriminado.
Poco seguimiento a la huelga
Pese a todo, lo cierto es que Los CDR se han encontrado con un pobre respaldo en la huelga de este jueves. Con llamadas a "echar fuera a las fuerzas de ocupación" y en protesta al "juicio farsa", los CDR apenas han congregado a medio millar de personas en Gerona, y a unos pocos miles en Barcelona.
Exceptuando los cortes de carretera que han provocado fuertes retenciones debido a la quema de neumáticos en algunos tramos, la inmensa mayoría de comercios del centro de Barcelona han abierto sus puertas. En otros puntos de la región, como en Gerona, los piquetes han obligado a cerrar las persianas en grandes centros comerciales, cuyas fachadas han sido pintadas con palabras como "traidores" o referencias a Vox y a la "injusticia" española.