Al presidente del tribunal que juzga a los líderes independentistas del procés, Manuel Marchena, se le ha agotado la paciencia después de que un testigo, el responsable de Difusión Institucional de la Generalitat Jaume Mestre, recurriese en demasiadas ocasiones a respuestas como “no lo sé” o “no me acuerdo” cuando se le preguntaba acerca de las campañas para promocionar el referéndum ilegal del 1-O.
El juez ha interrumpido el interrogatorio que el fiscal Jaime Moreno le estaba realizando a este testigo para recordarle que el Código Penal no castiga solo los testimonios que no dicen la verdad sino también a aquellos que acuden en numerosas ocasiones a respuestas evasivas, “inexactitudes o silenciando hechos que le fueran conocidos”.
Le ha advertido de que el tribunal no ha valorado todavía si sus respuestas son ciertas o no porque lo tendrá que decidir cuando dicte la sentencia después de estudiar todas las pruebas. “Pero es evidente que hay preguntas que está usted eludiendo”, le ha reprochado al testigo. Por su parte el fiscal, Jaime Moreno ha pedido oficialmente que se le investigue por falso testimonio ante el Juzgado de guardia, algo que el magistrado ha emplazado en todo caso a después de la sentencia.
