El diputado francés y excandidato a la Presidencia Jean-Luc Mélenchon (France Insoumise) ha advertido de que el exprimer ministro francés, Manuel Valls, está respaldando las candidaturas de Cs y de PP a las elecciones del 21 de diciembre porque le gusta "la pelea, exagerar e incendiar", y ha pedido el voto para el líder de los comunes, Xavier Domènech."Ustedes no necesitan que venga un exprimer ministro francés para que les diga cómo pegarse", ha ironizado en una entrevista de Europa Press, y ha advertido de que su talante es más tranquilo y que aboga por los que buscan el diálogo y no la confrontación, como, según él, lo hace el líder de los 'comuns'.En esa línea, ha recordado que él es de corte jacobino, un patriota, pero que, cuando Córcega plantea una independencia de Francia, tiene que escuchar lo que los corsos están pidiendo."¿Qué vamos a hacer? No vamos a hacer como Mariano Rajoy: mandar policía y fuerzas armadas. Porque la nación y la patria es republicana, no es una camisa de fuerza. La patria es un bien común, cuando hay amor y cuando la gente quiere vivir junta. Eso no se puede imponer por la fuerza", ha explicado.
Xavier Domènech
Por eso, ha subrayado que se siente bien al ir a Cataluña, concretamente a Badalona (Barcelona), a apoyar en campaña "al único partido que propone la conciliación y la reconciliación, y el sorpaso de la frontera (entre bloques) que prioriza el progresismo como horizonte"."Si se puede arreglar todo esto con conciliación y superando esta frontera, me parece muy bien", ha dicho en relación a la frontera que a su juicio imponen los bloques independentista y constitucionalista --aunque ha aclarado que no le gusta esa palabra para referirse a PP y Cs, porque los considera defensores de la vieja constitución que Mélenchon apuesta por cambiar--.
Equidistancia
Preguntado por las críticas a los 'comuns' sobre que son equidistantes entre los dos bloques, ha dicho que son unas críticas "normales" y que, si ellos se identificaran con uno u otro bloque, él no estaría dándoles apoyo."Si la gente quiere pelearse, que se peleen y lo decidan votando. Y si no quieren, que voten a CatECP", ha clamado, y ha pedido el voto para la candidatura de Xavier Domènech a aquellos que quieran una salida democrática, constituyente y respetuosa con los derechos cívicos.Ha apostado por la apertura del proceso constituyente, motivo por el cual considera que su homólogo en Madrid es el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, y que en Cataluña es Xavier Domènech, y ha advertido de que "puede ser que al final el proceso constituyente sea para todo el país y no solo para Cataluña"."Sé que es más fácil decidir 'soy blanco o negro'. Eso es más fácil. No digo que no sea justo. Yo no soy catalán, ya me basta con ser francés, pero creo que CatECP tendrá un papel central tras las elecciones", ha afirmado, bromeando con su nacionalidad.
Rechaza la unilateralidad
Preguntado por los defensores de la unilateralidad, ha explicado que él no acude a la campaña a dar lecciones a nadie sobre lo que tienen que hacer en Cataluña, pero considera que "es mejor dialogar, y hacer un referéndum en el que cada uno se compromete a estar de acuerdo con los votos al final"."Mejor esto que una confrontación total", y ha culpado a la UE de la tensión política que se vive en Cataluña, porque considera que los recortes que ha exigido al Estado han llevado a esta situación.Ha recordado que el sentimiento de identidad propia de los catalanes viene de lejos, pero ahora la gente "siente que no puede seguir como está, y la culpa, el crecimiento de las tensiones, es de la política europea".Considera que, si España no tuviera paro y hubiera actividad e intercambio entre regiones --algo de lo que acusa a los recortes impuestos por la UE--, la voluntad nacionalista no sería "tan fuerte que necesitaría la ruptura con España", por lo que ha concluido que su respaldo a la candidatura de Domènech se basa en considerar que están en la misma lucha."Por eso en las próximas elecciones europeas que vamos a celebrar en 2019, si hay listas transnacionales, yo quiero estar en una lista con Pablo, Domènech y otros y otras", ha dicho.Preguntado por la falta de efectividad de las reivindicaciones de los sindicatos para detener la reforma laboral del presidente francés, Emmanuel Macron, ha asumido que él les dio apoyo, que no tuvo el seguimiento que esperaba por parte de los franceses, y se ha conjurado para levantar a la juventud a partir de enero, aunque no ha querido desvelar su estrategia.