España se ha convertido en el principal país receptor de migración en el Mediterráneo. Casi la mitad de las personas que han llegado por mar a Europa desde el 1 de enero hasta el 12 de diciembre de 2018 lo han hecho a través de las costas mediterráneas españolas, según las últimas cifras de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Del total de 111.237 migrantes y refugiados que ingresaron en el continente europeo en ese periodo, 55.206 accedieron por España, lo que implica que la tasa de llegadas registrada por el país es superior a las mil por semana durante todo el año.
Solo este mes han llegado a España más personas por mar desde el norte de África que en cualquiera de los primeros cuatro meses de 2018 y, desde el 1 de noviembre, las llegadas de migrantes han sobrepasado las 150 por día, mientras que durante el primer tercio de 2018, el promedio de España fue de menos de 40 al día.
Pese a que el año pasado las llegadas a Europa superaron las de 2018, España registró solo 20.043 migrantes, de acurdo a datos de la OIM
Sin embargo, la ONU aclara que el número de llegadas registradas en Europa hasta 2018 (111.237) es bajo en comparación con el señalado en el mismo periodo en 2017, cuando se sitúo en 166.737, y en 2016, año en el que ascendió a 358.018.
Pese a que el año pasado las llegadas a Europa superaron las de 2018, España registró muchas menos. De acuerdo a los datos de la OIM, organización asociada a la ONU, solo 20.043 migrantes llegaron por mar al país en 2017.
Italia versus España
En el caso de Italia ocurre a la inversa. El país transalpino fue receptor de 118.019 migrantes en 2017, pero este año la cifra ha descendido hasta los 23.122. Recién aterrizado en Moncloa tras la moción de censura contra Mariano Rajoy, Pedro Sánchez se vio sorprendido por la disyuntiva de acoger o no a los 629 migrantes que iban a bordo del buque 'Aquarius'.
El vice primer ministro y titular de Interior italiano, Matteo Salvini, se negó al rescate, pero el Gobierno español los acogió despertando las críticas de parte de la oposición y de partidos en auge como Vox, que, entre otras medidas, propone la deportación de los inmigrantes ilegales a sus países de origen.
Dudo mucho que un migrante tenga en cuenta uuna moción de censura antes de salir de su país y de dejar a su familia, eso no forma parte de su ecuación"
¿Se ha producido realmente un 'efecto llamada'? Oussama El Baroudi, portavoz de la Organización Internacional para las Migraciones, considera que no. Según explica a 'Vozpópuli', las llegadas ya habían aumentado antes del cambio de Ejecutivo. "Dudo mucho que un migrante tenga en cuenta una moción de censura antes de salir de su país y de dejar a su familia, eso no forma parte de la ecuación", considera.
Además de un 'efecto llamada', El Baroudi apunta a un "efecto salida": "Es el que se produce cuando hay una guerra y no hay servicios públicos, entre otros factores". "No existe ningún factor simple o exclusivo que esté conduciendo a un aumento de llegadas a España frente a Italia. Es probablemente una combinación de varios factores. No tenemos suficiente información para formar un análisis o resolución responsable acerca de si los migrantes han cambiando o no su ruta desde Libia a Marruecos", reconoce.
Crecen las mafias
Las llegadas a España, asegura, ya habían empezado a aumentar en 2016. Por contra, han bajado en Libia e Italia. "Las cifras son altas con respecto al año pasado, pero son manejables a nivel global si se respeta el principio de responsabilidad compartida. 55.206 personas no es el mismo volumen que hemos visto en otros países en 2014, 2015 y 2016", advierte.
De acuerdo a los datos de la OIM, en la ruta del Mediterráneo occidental hacia España, los cruces durante los últimos años se han ido incrementando. "La ruta parece estar reactivada y el tráfico de personas intensificado, pero es interesante observar que los flujos migratorios ya estaban aumentando en dicha ruta mucho antes de la desaceleración del año pasado en el Mediterráneo central", señala el experto.
El asistente de la OIM asegura que hay un aumento de las actividades de los traficantes. "Cuando alguien no tiene vías legales para poder llegar a Europa de forma regular y le ofrecen una oportunidad, la acepta aunque venga de parte de una mafia", dice. Algunas rutas se abren cuando se cierran otras porque, según compara El Baroudi, cuando uno bloquea el agua de una fuente, el agua sale por otra parte: "Los traficantes se adaptan".