Pablo Iglesias comienza a reconocer en público que el escenario para aprobar los Presupuestos de 2019 se complica mucho ante el cierre en banda de los partidos independentistas tras la petición de penas por rebelión por parte de la Fiscalía contra Oriol Junqueras y el resto de los encarcelados por el 1-O.
El líder de Podemos llamaba este domingo en una entrevista en La Vanguardia a asumir "la realidad", al tiempo que daba por descartada una visita al expresidente Carles Puigdemont Bélgica. "No creo que una visita a Waterloo cambiara la posición de Junts per Cataluña sobre los Presupuestos", aseguraba. La línea telefónica está abierta.
"En las próximas horas todos vamos a tener que reflexionar mucho, siendo conscientes de la realidad, de las dificultades, de que estamos más cerca de que haya elecciones en el 2019", advertía el secretario general de los morados. Todo un mensaje que sigue la línea de lo que Iglesias repite desde comienzos de octubre, antes de cerrar el preacuerdo de Presupuestos en La Moncloa con Pedro Sánchez.
Un eventual adelanto de los comicios generales por parte del actual Gobierno en nada beneficiaría a los independentistas. Una eventual llegada de PP y Ciudadanos al Ejecutivo pondría fin a la vía de diálogo abierta por los socialistas con el secesionismo. Y la mediación de Iglesias para desvincular la situación de los presos de la aprobación de las cuentas no habría servido de nada.
Desde la Ejecutiva del partido insistían en el aviso lanzado por Iglesias horas antes. "Cada vez parece más difícil que los Presupuestos salgan adelante", reconocía este lunes la coportavoz del Consejo de Coordinación, Noelia Vera. Pero dejando de lado el escenario del adelanto electoral, insistía en que Sánchez debe seguir adelante para materializar alguna de las medidas del pacto en el que Podemos tiene puestas todas sus esperanzas.
"El pacto está cerrado y estamos convencidos de que Pedro Sánchez lo va a defender, se va a dejar la piel", argumentaba Vera. Y es que trasladaba el propio Sánchez a puerta cerrada a la Ejecutiva de Ferraz era claro. No tiene ninguna intención de adelantar las elecciones generales antes del verano de 2019.
En el Gobierno ya se contempla la idea de -con los Presupuestos de Mariano Rajoy prorrogados- ir sacado adelante vía decreto medidas como la subida del Salario Mínimo, de las pensiones, o para los parados mayores de 52 años. Y, de momento, para mantener la presión sobre el Ejecutivo, eluden responder si mantendrán su apoyo a Sánchez una vez se vea incapaz de aprobar unas nuevas cuentas. "Cuando lleguemos a ese puente, veremos si lo cruzamos", respondía la portavoz del partido morado.
