Ningún miembro del Gobierno se reunió este jueves con Ciudadanos. Era un día clave en la gestión de la crisis de Cataluña, en tanto que el Ejecutivo decidía si comenzaba o no a poner en marcha la maquinaria burocrática y parlamentaria para implementar el artículo 155 de la Constitución frente al desafío separatista. Sin embargo, en lugar de Ciudadanos el espacio mediático se lo llevó el PSOE, pues la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría se entrevistó en Moncloa con la secretaria de Igualdad y número cuatro de Ferraz, Carmen Calvo, para abordar las primeras medidas del 155. Se confirmó así que el 155 se cuece entre PP y PSOE, mientras Ciudadanos queda relegado a una posición de observador.
Santamaría y Calvo analizaron juntas la carta-respuesta del jefe de la Generalitat, Carles Puigdemont, al segundo requerimiento del Gobierno. El president amenaza en la misiva con proclamar la declaración unilateral de independencia (DUI) si hay 155. El Ejecutivo contestó con el anuncio de un Consejo de Ministros extraordinario para este sábado donde se aprobará ese paquete de medidas destinadas a "restaurar la legalidad" en Cataluña.
En su caso, el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, visitó La Moncloa un día antes, el miércoles por la tarde, y se vio con el presidente del Gobierno durante una hora y cuarto. Sin embargo, Mariano Rajoy no anticipó a su socio naranja los detalles de ninguna medida, según informó el partido centrista, y se limitó a decirle que él y los suyos "serán informados cuando las actuaciones estén concretadas".
Y es que este acuerdo se ha cocinado básicamente entre populares y socialistas. Además de las sucesivas reuniones entre Rajoy y el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha habido contacto permanente de Gobierno y Ferraz a través de dos equipos negociadores. Por parte del Ejecutivo, han perfilado el desarrollo de dicho precepto constitucional la vicepresidenta y ministra de Administraciones Territoriales y el asesor de cabecera de Rajoy, Pedro Arriola. El secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón, persona de la máxima confianza de Sáenz de Santamaría, también ha tenido un papel activo.
En su visita el miércoles a Moncloa, Rajoy se limitó a decir a Rivera que él y los suyos "serán informados cuando las actuaciones estén concretadas"
En cuanto al PSOE, además de Carmen Calvo, han participado en esas conversaciones en la sombra el diputado José Enrique Serrano, exjefe de gabinete tanto de Felipe González como de José Luis Rodriguez Zapatero, y la también parlamentaria Meritxell Batet, integrante del PSC y enlace con la Ejecutiva de Miquel Iceta. Batet es experta en Derecho Constitucional.
Ajuste de déficit
No es la primera vez que el Gobierno adelanta actuaciones al PSOE sin saberlo la formación centrista, pese a que populares y naranjas son socios de investidura. Ya ocurrió con el pacto que PP y PSOE alcanzaron a finales del año pasado sobre el ajuste de déficit. Entonces, Rivera admitió que se había enterado por la prensa de la subida de impuestos especiales (alcohol de alta graduación, tabaco y bebidas azucaradas) que habían cerrado los dos grandes partidos. Además, el PSOE arañó al Gobierno una subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) del 8%.