“Aquí todo lo deciden Sánchez y Redondo”. Así se puede resumir el sentir común de muchos dirigentes del PSOE, críticos con el papel que está asumiendo el máximo asesor estratégico y jefe de gabinete de Pedro Sánchez, Iván Redondo. Según varias fuentes consultadas, tanto del PSOE como de Podemos, una serie de filtraciones lanzadas a grandes cabeceras nacionales, sobre todo a El País, estarían complicando las negociaciones para llegar a un gobierno pactado.
Incluso el todopoderoso José Luis Ábalos ha sido apartado de la primera línea de la negociación, poco después de que Sánchez le prometiera a Iglesias una mesa de diálogo para redactar un programa, que luego vetó, tal y como adelantó Vozpópuli. El despacho de Redondo se ubica a pocos metros del de Sánchez en La Moncloa. El experto en análisis estratégico goza de una gran influencia sobre el presidente en funciones y algunos ven su mano detrás del enquistamiento de la negociación con Sánchez.
Ábalos ve conveniente dejar a Podemos altos cargos en la administración, pero no ministros, y Redondo propone una segunda convocatoria electoral
En Podemos se quejan de que Sánchez se abrió a entregar a los morados secretarías de Estados en las reuniones con Iglesias, pero que luego rectifica su postura a través de los medios. Así, en varios periódicos han aparecido en las últimas semanas titulares contradictorios y que según los dirigentes de Podemos han sido dirigidos desde La Moncloa con el único objetivo de dificultar el pacto con Iglesias. Estos van desde hablar de “coalición” pocos días antes de las elecciones europeas y autonómicas, a culpar a Iglesias de pedir demasiado.
Desconfianza de Iglesias
“Fue Sánchez quien pidió a Iglesias la discreción, y es él quien filtra a la prensa cosas que ni siquiera se han debatido de forma oficial”, comentan miembros de la formación morada. El propio Iglesias desconfía de Sánchez.
“No habría la campaña mediática actual si no vieran como una posibilidad real y efectiva que nos vayamos a poner de acuerdo”, dijo en el Congreso el pasado miércoles. Y añadió: “Hemos visto en los últimos meses que los papeles aguantan frases y compromisos y promesas preciosas, pero que después no se cumplen. Fiarse de la palabra de un político es lo más imprudente que se puede hacer en la vida”.
El jefe de Gabinete del presidente está a la que salta para contrarrestar cualquier argumento de Podemos. Cuando Iglesias dio a entender que el acuerdo estaba más cerca de lo que parecía en un intento por calmar las aguas, Redondo se encargó de puntualizar a varios periodistas que no era verdad.
Enfrentamiento entre Ábalos y Redondo
En el trasfondo de los movimientos de Redondo se encuentra su reciente apuesta por una repetición electoral. Fuentes del PSOE y Podemos reconocen que Ábalos y Redondo se han intercambiado los papeles: si antes el político activo en Ferraz era quien alertaba sobre la inclusión de Iglesias en el consejo de ministros, mientras que Redondo se abría a esa opción, ahora es al revés. Es decir, que Ábalos ve conveniente dejar a Podemos altos cargos en la administración, pero no ministros, y Redondo propone una segunda convocatoria electoral.
El jefe de Gabinete del presidente está a la que salta para contrarrestar cualquier argumento de Podemos
Las encuestas señalan que, de repetirse los comicios, el PSOE subiría en escaños. Los estudios demoscópicos apuntan al efecto de la segunda vuelta, en la que los electores suelen decantarse por el voto útil hacia partidos mayoritarios. De ese esquema, también el PP se vería beneficiado. De aquí las dudas de Ábalos, que teme que un desplome de Podemos pueda favorecer una mayoría alternativa de la derecha.
Podemos por su parte quiere evitar otras elecciones. Dirigentes de esa formación sostienen que Iglesias no teme que el nuevo partido de Íñigo Errejón pueda entrar en la competición electoral (esta es una de variables manejadas por Redondo) y robarle muchos votos. Pero alertan de que “en ningún caso” darán su apoyo a Sánchez a cambio de nada: “Esto sería un suicidio”, zanjan en Podemos.
