El Palacio de la Zarzuela ha modificado ligeramente el formato con el que el Rey Felipe VI recibe a los portavoces de las fuerzas políticas que acuden a la ronda de consultas con vistas a la investidura, de manera que en esta ocasión es el jefe de Estado quien los espera en la puerta de su despacho.
El nuevo formato incluye nueva ubicación de cámaras y fotógrafos, de manera que ahora el Rey y su interlocutor no posan frente al tapiz que cubre una de las paredes del salón de audiencias, sino que simplemente las cámaras captan su saludo a la puerta del despacho con las ventanas del salón de fondo.
El protocolo habitual hasta ahora consistía en que cada portavoz entraba al salón de audiencias y esperaba al jefe de Estado, que salía de su despacho tras un anuncio de su ayudante de campo. El Rey se dirigía entonces hasta el lugar donde le esperaba su invitado y ambos se saludaban y posaban para las cámaras antes de entrar al despacho contiguo.
Un saludo más rápido
Con el nuevo formato, el saludo es más rápido y todo el proceso se desarrolla de manera más ágil, en una ronda de consultas que incluye a 15 portavoces de fuerzas políticas en dos días, en su mayoría con 45 minutos entre un portavoz y otro.
No es la primera vez que la Casa del Rey cambia el protocolo para hacerlo más ágil. En enero de 2016, durante la segunda ronda de consultas después de las elecciones de diciembre de 2015, también era el Rey quien esperaba a sus invitados y de esta forma se aceleraba algo el saludo --era la segunda ronda en dos semanas-- pero no se eliminó el posado. La nueva fórmula hace que el saludo sea más rápido aún.