Roger Torrent es el nuevo presidente del Parlament de Cataluña. Politólogo, militante de ERC, no tiene procesos judiciales pendientes y goza del respeto del bloque secesionista. Protegido de Marta Rovira, la número dos de la formación, Torrent tuvo cierto protagonismo durante la reciente campaña electoral, en la que se batió el cobre en algún debate televisivo.
El candidato de la formación se presenta a sí mismo en las redes sociales como diputado del Parlament de la República catalana, además de alcalde de Sarrià de Ter. Torrent ha sido diputado dos legislaturas y ha crecido en la órbita del separatismo más radical, el de Gerona, el bastión del expresidente Carles Puigdemont, con quien mantiene una relación estrecha y de relativa confianza, según fuentes consultadas por Vozpópuli.
Tras una primera ronda de votación en la que Torrent ha sumado 65 apoyos del bloque independentista frente a 56 del bloque denominado 'constitucionalista' y 9 abstenciones (ocho de los diputados de Catalunya En Comú-Podem), se ha realizado la segunda votación a la que obliga el reglamento ante la falta de mayoría absoluta (68 diputados). La posición del grupo donde se integra Podemos ha sido determinante, ya que si los 'comunes' hubiesen dado su respaldo a José María Espejo-Saavedra, el candidato de Ciudadanos, se habría producido un empate a 65. Tras cuatro votaciones, este se habría convertido en presidente de la Cámara, por pertenecer al grupo más numeroso.
Arranque "partidista"
El pleno de constitución del nuevo Parlament arrancaba pasadas las once de la mañana con un discurso de Ernest Maragall, el presidente de la Mesa de Edad, formada por el parlamentario más veterano y los dos más jóvenes (Rut Ribas (27 años) y Gerard Gómez del Moral (28 años).
La líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, no tardaba en denunciar desde su escaño lo que ha percibido como un discurso "partidista" por parte de un miembro de ERC, el partido de Torrent y al que pertenecen los tres miembros del órgano que tiene atribuidas las funciones para dirigir la sesión de este miércoles hasta la composición de la Mesa definitiva.
Maragall ha reivindicado durante su discurso inicial el resultado del referéndum ilegal del 1 de octubre, acusando al Gobierno de Rajoy "humillar y castigar" a Cataluña. También ha dedicado palabras afectuosas a los diputados electos que permanecen en la cárcel por decisión del Tribunal Supremo, investigados por un presunto delito de rebelión, así como para los exmiembros del Govern que se encuentran huidos de la Justicia en Bélgica.
En los asientos de todos ellos, sus compañeros independentistas han colocado grandes lazos amarillos. La primera fila de escaños, habitualmente ocupada por los miembros del Ejecutivo catalán ha estado vacía durante la sesión, después de que fueran cesados en aplicación del artículo 155 de la Constitución por parte del Gobierno de Rajoy.
Maragall ha anunciado la decisión de aceptar la petición de delegación del voto de los tres diputados electos que permanecen en la cárcel; Oriol Junqueras (ERC), Joaquim Forn y Jordi Sánchez (JuntsxCat). Ante esta decisión, que contradice el informe no vinculante elaborado por los letrados de la Cámara, la portavoz de Ciudadanos ha pedido la reconsideración de la misma. Los requisitos contemplados por el artículo 93 del Reglamento son permiso de paternidad o maternidad; enfermedad grave o incapacidad.
A juicio tanto de la formación naranja y como del PP, ninguno de estos supuestos se cumple con los diputados electos. No obstante, el líder del PSC, Miquel Iceta, ha tomado la palabra para manifestar que la decisión tomada por los miembros de la Mesa de Edad le parece la “interpretación más correcta”. Junqueras ha pedido delegar su voto en la secretaria general de su partido, Marta Rovira; Sànchez y Forn lo han hecho en el diputado y exconsejero Jordi Turull.
Las primeras palabras de la sesión de este miércoles las ha pronunciado el secretario general de la Cámara, Xavier Muro, leyendo el decreto de convocatoria del pleno de constitución del pleno, rubricado por el jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy. Precisamente, desde Moncloa han asegurado que no tienen previsto recurrir la delegación del voto de los diputados electos encarcelados, ya que el auto del juez del Supremo Pablo Llarena abría la puerta a esta posibilidad.
En exterior del parque de la Ciudadella, donde se encuentra ubicado el Parlament, cientos de manifestantes se han concentrado colocando lazos amarillos en las vallas del parque como muestra de solidaridad con los representantes que permanecen en prisión preventiva. Los Mossos han blindado el perímetro y sólo permiten el acceso de parlamentarios, periodistas y trabajadores de la cámara.
