Las conversaciones entre PSOE y Podemos para la formación de un Gobierno de coalición saltaron por los aires a última hora de la noche con el cruce de reproches y papeles de la negociación, y sin que hubiese nuevas reuniones para intentar desbloquear la situación. Así las cosas, Pedro Sánchez se presentará hoy a la segunda votación de investidura sin haber atado un pacto programático y de carteras con Pablo Iglesias, por lo que saldrá derrotado del hemiciclo salvo vuelco de última hora.
Aunque algunas fuentes del PSOE señalaron ayer que las negociaciones estaban rotas, no se descarta que en algún momento de la mañana de hoy se retomen las conversaciones o se busque un acuerdo in extremis.
En teoría, hay tiempo hasta las 14.30 horas, que es cuando los 350 diputados tendrán que votar la investidura de Sánchez por segunda vez esta semana, aunque las posiciones están muy alejadas y en las direcciones de ambos partidos se empieza a hablar de la conveniencia de esperar a septiembre para buscar la investidura en una segunda oportunidad.
En Podemos, por ejemplo, aún confiaban anoche en reconducir la situación y no lo daban todo por perdido. Fue el caso de la portavoz de la Ejecutiva de Podemos, Noelia Vera, quien en su cuenta de Twitter se quejó de que el "centenario" PSOE esté explicando por qué su partido no puede tener determinadas responsabilidades de Gobierno, aunque se mostró confiada en lograr un acuerdo sobre la bocina. "Seguimos", fue su alegato final.
https://twitter.com/VeraNoelia/status/1154118961031733249?ref_src=twsrc%5Etfw
El problema es que apenas queda tiempo para negociar. La vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, hablará a las 09.00 horas en La Ser y es muy probable que en ese momento se sepa ya qué va a ocurrir en la decisiva votación.
La Ejecutiva del PSOE se reunirá luego a las 10.30 para analizar la situación de bloqueo y al mediodía, Izquierda Unida ha convocado a su máximo órgano político para decidir el sentido del voto. La decisión que adopte el partido de Alberto Garzón, que forma parte de Podemos, podría ser un anticipo de lo que llevará la formación morada con sus confluencias al hemiciclo, aunque IU no descarta romper la disciplina de voto con Podemos y apostar por el 'sí' a Sánchez.
Del ultimátum a las filtraciones
La jornada de ayer fue de todo menos tranquila. Los socialistas dieron a la hora de comer un ultimátum a Podemos para que se pronunciase a favor o en contra sobre la última oferta que Calvo había entregado en mano al negociador morado, Pablo Echenique, poco antes de la hora de comer.
La tarde discurrió sin que hubiese una respuesta oficial por parte de la dirección de Unidas Podemos, hasta que se produjo una conversación telefónica entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias en la que el presidente del Gobierno en funciones comunicó al segundo que no aceptaba las competencias sociales que le exigía y que era su "última palabra".
Tras ello, el PSOE filtró la propuesta inicial de Podemos con una vicepresidencia y cinco ministerios, así como la supuesta última oferta que Calvo hizo a Echenique con la citada vicepresidencia para Irene Montero y tres ministerios más -Sanidad, Vivienda e Igualdad-, aunque fuentes de Podemos se apresuraron a negar que esta oferta se hubiera llegado a producir en algún momento.
La citada oferta de Calvo a Echenique fue vista como insuficiente desde el principio por parte de Podemos y se insistió en que no querían "entrar en el Gobierno a cualquier precio". El secretario de Comunicación de la formación morada, Juan María del Olmo, resumió anoche el engaño al que les llevaba la propuesta socialista.
https://twitter.com/juanmalpr/status/1154125290907590657?ref_src=twsrc%5Etfw
Desde Podemos se insistió en que querían competencias para desarrollar políticas sociales en Igualdad, Trabajo, Hacienda y Transición Ecológica. En concreto, sus objetivos se centran en poder subir el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), aprobar un impuesto a la banca, bajar la factura de la luz, extender la educación de 0 a 3 años y aprobar los permisos de maternidad y paternidad “iguales e intransferibles”.
Podemos censuró además que el PSOE no esté "dispuesto a compartir ninguna competencia social" después de que la formación morada hubiese renunciado en los últimos días a entrar en los llamados ministerios de Estado (Exteriores, Defensa, Interior y Justicia) y a que Pablo Iglesias fuese ministro en el nuevo Ejecutivo de coalición.
Tercera jornada del debate de investidura
La tercera jornada del debate de investidura que hoy vivirá el Congreso tiene un formato distinto al del primer y segundo día, ya que no hay debate del candidato con los líderes de la oposición y todas las intervenciones previas a la votación definitiva están tasadas en tiempos muy breves.
El pleno del Congreso volverá a reunirse a las 13.30 horas para escuchar al candidato socialista y a los máximos representantes de los grupos parlamentarios, cuyas alocuciones se ordenarán de mayor a menor número de escaños. Por lo tanto, el primero en tomar la palabra en la tribuna de oradores será Pedro Sánchez, pero la novedad es que no tendrá límite de tiempo, sino que deberá resumir su plan de gobernabilidad en diez minutos.
Tras él subirán al estrado los líderes de los grupos parlamentarios. Cada grupo dispone de un tiempo máximo cinco minutos, inclusive el Grupo Mixto en el que están JxCAT, Bildu, Coalición Canaria, Compromís y el Partido Regionalista de Cantabria (PRC), así que el turno de palabra quedará muy comprimido.
Como la primera votación del martes acabó a las 14.25 horas, ésta será la hora a partir de la que la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, llamará a los diputados para que voten por segunda vez. El procedimiento para la emisión de los votos no cambia: un secretario de la Mesa del Congreso extraerá una bola de un saco que se corresponde con los nombres y apellidos de un diputado. Él será el primero en ser llamado por la Mesa para levantarse de su escaño y decir "sí", "no" o "abstención".
Cuando haya votado todo el hemiciclo, llegará el turno de los ministros en funciones, así como del presidente, y acto seguido, de los integrantes de la Mesa. Batet es la última en pronunciar su voto. Hay que recordar que entre la primera y segunda votación hay dos diferencias: en la primera es necesaria la mayoría absoluta (176 ‘síes’), en tanto que en la segunda bastan más ‘síes’ que ‘noes, la mayoría simple.
Solo logró el voto del PRC
Sánchez logró el martes 124 votos a favor de su investidura, ya que a los 123 "síes" del PSOE solo se unió el del PRC, en tanto que 170 diputados le dijeron "no". Para que el secretario general de los socialistas salga mañana con la investidura hecha, debe añadir a los 124 votos los 42 de Unidas Podemos y esperar varias opciones: una de ellas es que ERC pase del ‘no’ del martes a una abstención y que tanto PNV como Bildu se mantengan en la abstención.
Si la segunda votación supone una nueva derrota para Sánchez, empezará el plazo de dos meses para que un candidato recabe la mayoría necesaria antes de que el Rey disuelva la legislatura y convoque nuevas elecciones. En ese caso, los nuevos comicios generales caerían en el 10 de noviembre.