Política

La tesis de Sánchez: El PSOE se estrella contra los letrados del Senado

La comisión sobre la tesis de Sánchez cuenta ya con el aval de los letrados del Senado. "Es un asunto de interés público", dice el informe de los técnicos. El presidente del Gobierno estará obligado a comparecer

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El escándalo de la tesis de Pedro Sánchez logró esquivar un pleno en el Congreso, pero habrá de hacer frente a una comisión específica en el Senado. El informe de los letrados de la Cámara Alta, solicitado por el propio grupo socialista, en evidente maniobra dilatoria, han ratificado el "interés público" de este asunto, dada su "repercusión en la esfera pública", por lo que el presidente del Gobierno no podrá evitar su comparecencia en esta comisión, cuyo primer paso será  su aprobación en el próximo pleno del 7 de noviembre. 

La Mesa de la Cámara Alta ha recibido este informe y elabora en estos momentos un calendario para proceder, una vez que los diferentes grupos hayan presentado sus planes de trabajo y la designación de sus miembros, a su puesta en marcha. "Génova tiene la manija y modulará los tiempos según esté el termómetro político", dicen fuentes parlamentarias, que auguran que esta instancia parlamentaria no echará a andar hasta el mes de marzo. Sánchez cerraría la ronda de comparecencias, según explicó Vozpópuli, en una fecha por determinar, que podría coincidir con las vísperas de las elecciones del próximo mes de mayo.

La comisión es una iniciativa del PP, que actúa en solitario y que tiene en contra al PSOE y algunos de sus apoyos parlamentarios, como el PNV. "No esperamos mucha colaboración por parte de los socialistas, que le tienen pánico a entrar en las tripas de este asunto, que es un escándalo mayúsculo", señalan las mencionadas fuentes. La tesis de Sánchez se ha caído de los asuntos de primera línea que ocupan el escenario político.

Tiempos y comparecencias

En el PP se espera a que el Senado organice la comisión para modular los tiempos y la intensidad del debate. El visto bueno de los letrados, no por esperado, se ha convertido en un motor de impulso en un asunto con el que Sánchez tuerce el gesto cada vez que emerge en el debate público. 

Días atrás el propio presidente del Gobierno esgrimió algunas sospechas de presuntas irregularidades en la tesis de Ignacio Cosidó, presidente del grupo popular en la Cámara Alta. El jefe de la bancada popular respondió a estas acusaciones con datos que evidenciaban la falsedad de las acusaciones. 

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