El terremoto político desatado en el Congreso de los Diputados por la manifiesta ruptura del Partido Popular con Vox durante el debate de la moción de censura contra Pedro Sánchez ya ha tenido sus réplicas autonómicas. Aunque el líder de la extrema derecha pidió desde la tribuna a “murcianos, madrileños y andaluces que estén tranquilos”, lo cierto es que ya han comenzado los ‘gestos’ del malestar de Vox.
Eso sí, según garantizan fuentes oficiales de los tres Gobiernos, “la sangre no llegará al río”. "No van a arriesgarse a que el PSOE gobierne en ninguno de los tres sitios", indican fuentes regionales del PP a 'Vozpópuli'.
El primer "gesto" tuvo lugar en Andalucía tan solo minutos después de que el presidente del PP se desmarcase públicamente de un descolocado Santiago Abascal. La comunidad donde Juanma Moreno gobierna con Ciudadanos gracias al apoyo parlamentario del partido verde fue testigo de la repentina suspensión de una reunión entre ambas formaciones clave para los presupuestos.
"No rompen nada"
Alejandro Hernández, el hombre fuerte de Abascal en la región, dio carpetazo al encuentro que los diputados de Vox iban a mantener con el consejero de Hacienda andaluz. Según fuentes parlamentarias de Vox, decidieron anular la cita porque "no era el mejor día para debatir" las cuentas. "Pero no rompen nada de nada", zanjan.
El partido convocó una rueda de prensa -también repentina- en torno a las 18.30 horas de la tarde. Hernández justificó la negativa a reunirse con el responsable de Hacienda asegurando que había sido "una cuestión de tiempo y problemas de agenda". Sin embargo, la guerra abierta entre Casado y Abascal que había tenido lugar horas antes en el Hemiciclo se hacía patente en el mensaje de Hernández, que auguró "un nuevo escenario en el que se ha quebrado la confianza mutua".
"Las negociaciones tienen que ser replanteadas toda vez que no podemos consentir que se falte al respeto a nuestros votantes. Todo es posible en esta nueva situación, incluso que la Junta tenga que pactar los presupuestos con sus nuevos compañeros del cordón sanitario a Vox", planteó.
La mano derecha de Abascal en Andalucía señaló que los andaluces y españoles no tienen que pagar "la inquina" de Casado y prometió que las exigencias para secundar los presupuestos iban a ser las mismas. "Pero ahora vamos a ser muchos mas rígidos para que se cumplan", advirtió.
El cambio de Gobierno ha llegado después de cuatro décadas de Gobiernos del PSOE. Vox sabe que su utilidad depende de facilitar y permitir ese cambio” aseguran fuentes de la Junta
Tras la sorpresa inicial, fuentes de la presidencia andaluza informaban a este medio que la reunión solo “se había aplazado al próximo lunes”.
Las mismas fuentes aseguran que aunque se encuentran en plena negociación de los Presupuestos, “no debe afectar”, y remiten a la especificidad de la región: “El cambio de Gobierno ha llegado después de cuatro décadas de Gobiernos del PSOE. Vox sabe que su utilidad depende de facilitar y permitir ese cambio”. Enmarcan el aplazamiento de la reunión de este viernes en que “quieran escenificar de alguna forma un poco de malestar”, pero zanjan: “Habrá presupuestos”.
Madrid, el caso más complicado
El caso más problemático sería el de Madrid, donde la tradicional inestabilidad en la coalición entre PP y Ciudadanos y la amenaza de la moción de censura de la izquierda da más protagonismo a Vox.
Además, están en juego unos presupuestos para intentar sacar a la región de la ruina del coronavirus que aún no se han aprobado y a los que el grupo de Rocío Monasterio ha puesto muchas líneas rojas, como la rebaja del gasto supérfluo, reducción de consejerías o la bajada de impuestos. Hoy mismo, Monasterio emitía una dura nota en la que denunciaba que “PP y Cs se niegan a rebajar” la carga fiscal a los madrileños.
Fuentes oficiales de la presidencia de Díaz Ayuso rebajan el riesgo de que se produzca una pérdida del apoyo de Vox para las grandes leyes, aunque son conscientes de la dificultad que hay para aprobar las cuentas. “No sería sensato que haya una traslación a la estabilidad de los gobiernos autonómicos” dicen estas fuentes. El entorno de Rocío Monasterio asegura a este diario que "Vox tampoco romperá nada en Madrid porque no hay nada que romper".
Ningún movimiento en Murcia
En Murcia, fuentes de la presidencia de López Miras, cuyo Gobierno está comenzando también la tramitación de los Presupuestos, aseguran que "de momento aquí, Vox no ha hecho ningún movimiento" en 'represalia' por lo sucedido en el Congreso.
A diferencia de Andalucía y Madrid, la posición de fuerza de Vox en esa región es más débil puesto que las sucesivas escisiones y alguna expulsión, el grupo parlamentario ha quedado partido en dos.
La especulación sobre el futuro de los pactos en las tres regiones surgió después de que Santiago Abascal, que reconoció estar "perplejo" ante la intervención de Casado, asegurase que "si yo fuera como usted ha demostrado ser aquí, ustedes dejarían de gobernar en Andalucía, Murcia y Madrid".
El candidato a la presidencia de una ya fallida moción de censura contra Sánchez trataba de capear con esta advertencia la embestida del líder del PP. "Me gustaría que alguna vez el PP diese gracias por haber facilitado gobiernos a cambio de cero cargos", reclamó.
