El PP ha puesto en la diana a Fernando Grande-Marlaska tras el documental de la BBC en el que se difunden imágenes de la matanza de la valla de Melilla el pasado 24 de junio. Los populares, que ayer exigieron la dimisión del ministro del Interior, mantienen la amenaza de apoyar una comisión de investigación en el Congreso. Una 'línea dura' en un asunto tan delicado como la inmigración que el partido aplica como respuesta a la 'traición' de Sánchez tras la tragedia de El Tarajal.
La consigna del Partido Popular en este asunto es clara: ir "hasta el final" después de que el PSOE, el presidente del Gobierno y el ministro del Interior rompieran todos los puentes para abordar, de forma conjunta, un problema político y diplomático de primer orden, como es el de la inmigración ilegal hacia las vallas de Ceuta y Melilla.
Según las fuentes del PP consultadas por Vozpópuli, los dos principales partidos siempre habían respetado un 'pacto de no agresión' para dar apoyo, desde la oposición, a la política exterior y de seguridad aplicada por el Gobierno de turno para contener la inmigración ilegal en las dos ciudades autónomas y no convertir ese asunto en motivo de un enfrentamiento partidista. Un acuerdo que rompió el PSOE de Sánchez.
El Tarajal, punto de inflexión
En ese sentido, los cargos populares contactados recuerdan que fue el actual presidente del Gobierno el primero en traicionar ese pacto tras la muerte, en 2014, de 15 inmigrantes en la Playa del Tarajal de Ceuta que intentaban llegar a nado a suelo español.
Después de ese suceso, un Pedro Sánchez que todavía no era líder del PSOE fue uno de los diputados socialistas que más agitó, vía Twitter, el debate sobre el estado de la nación, reprochando a Rajoy que no hablara de forma explícita de los sucedido en El Tarajal. Meses después, ya al frente del Partido Socialista, exigió "la defensa de los derechos humanos" en las fronteras de Ceuta y Melilla.
Ya en 2018, y meses antes de la moción de censura que le llevó a La Moncloa, Sánchez se hizo eco de la muerte de un porteador en la frontera de Melilla tras una avalancha para cargar de nuevo con dureza contra Mariano Rajoy: “Se repite la tragedia y el Gobierno permanece impasible. Necesitamos medidas urgentes que garanticen la seguridad y los derechos humanos en los pasos fronterizos de Ceuta y Melilla”.
El año pasado, como presidente del Gobierno, sobrevoló junto a Fernando Grande-Marlasla la playa del Tarajal en su visita a Ceuta, volviendo a recordar lo sucedido en 2014. El ministro, por su parte, prometió a su llegada al Gobierno un cambio en la valla que eliminara las concertinas y acusó al PP de vulnerar los derechos humanos de los inmigrantes.
El PP "se la devuelve" a Sánchez
Con esos antecedentes, explican desde el PP, "ni Sánchez ni Marlaska pueden pretender que nosotros no digamos ni hagamos nada ahora". Las fuentes consultadas explican que "el PSOE rompió con El Tarajal la cooperación existente entre los dos grandes partidos en materia de inmigración" y, de hecho, "esa línea se ha mantenido tras la llegada de Sánchez a Moncloa".
Así, destacan desde el Partido Popular, ha sido el actual presidente el que ha cambiado de forma unilateral la posición de España respecto al Sáhara y el que ha decidido "actuar por su cuenta" en materia de inmigración sin informar a otras administraciones de otro color político. Un hecho "sin precedentes", al igual que ocurre con el 'silencio informativo' respecto a las relaciones exteriores con Marruecos.
Ellos criticaban las devoluciones en caliente y ahora las ocultan, primero, y después las justifican
Ahora, tras el documental de la BBC sobre lo ocurrido en la valla de Melilla en junio, el PP "se la devuelve" tanto a Sánchez como a Marlaska, aplicando su misma medicina: "Ellos criticaban las devoluciones en caliente y ahora las ocultan, primero, y después las justifican".
Por todo ello, el Grupo Popular no descarta "ninguna actuación parlamentaria" contra el ministro del Interior -incluida la reprobación o la comisión de investigación-. La propia portavoz y secretaria general del PP, Cuca Gamarra, dejó abierta la puerta a estas actuaciones, que se decidirán en los próximos días, cuando Feijóo regrese a España de su gira por Iberoamérica.
Mientras, el PP sigue exigiendo "explicaciones" a Marlaska, con su comparecencia en el pleno y en la Comisión de Interior del Congreso, y el visionado de las imágenes, en poder del Ministerio, de lo ocurrido el pasado 24 de junio en la valla de Melilla.