La Asamblea de Ceuta ha aprobado este lunes con los votos a favor de los diputados del PP, el PSOE, Caballas y dos no adscritos que abandonaron Vox en enero (un total de 19 sobre 25) el mayor presupuesto de la ciudad autónoma de la historia para 2021, un total de 320,2 millones de euros que servirán como "escudo social" frente a la pandemia del coronavirus.
El debate parlamentario para dar luz verde provisional a las cuentas de la institución para el próximo ejercicio ha propiciado también la ruptura del pacto de gobernabilidad que el PP y Vox han mantenido durante cerca de un año en la localidad española norteafricana. "Bienvenida la 'derechita cobarde' que no quiere parecerse a la extrema derecha que quiere devolvernos a las trincheras", ha contestado la consejera de Hacienda del Ejecutivo local, Kissy Chandiramani (PP), a las acusaciones de Vox de haberse "sometido" a "lobbies promarroquíes".
El Gobierno que preside Juan Vivas ha defendido su documento como la forma de "paliar un doble tsunami: el del bloqueo de la frontera, una decisión unilateral de Marruecos que ha afectado al transporte y al comercio de forma directa, y el de la pandemia y las restricciones de movilidad, única forma de parar el virus hasta que tengamos una vacuna".
"Estabilidad en momentos de tributación"
El PSOE, primer grupo de la oposición en la Asamblea, ha votado que sí porque "es responsabilidad, es participar en la solución de los problemas y no convertirse en uno más; es hacerlo a crear empleo y acometer obras en las barriadas, a facilitar ayudas a empresas y trabajadores, a la convivencia entre todos los ceutíes".
"Votar sí", ha añadido el portavoz socialista, Manuel Hernández, "es respaldar la estabilidad en momentos de tribulación". "No estamos votando a favor del Gobierno, sino de lo que en estos momentos es mejor para los ceutíes porque más allá del griterío partidista se encuentra una sociedad ceutí golpeada y maltrecha que espera respuestas y soluciones", ha resumido.
Su homólogo de Vox, que en enero permitió la aprobación de las cuentas de la Ciudad para 2020, Carlos Verdejo, ha arremetido contra el Ejecutivo por "someterse" a "lobbies promarroquíes" y ha acusado a Vivas de propiciar un gobierno "popular-socialcomunista". "No es que Vox esté solo, es que para el futuro de esta ciudad y de España solo queda Vox", ha proclamado.
"Una ciudad de todos"
"El PSOE no va a permitir que el 50 por ciento de los ceutíes se sientan excluidos de una institución como esta porque propugnamos una ciudad de todos y para todos con independencia de credos y clases sociales, por eso participamos de estas cuentas, para evitar que crezca el cisma causado por la irrupción de la ultraderecha", ha argumentado el líder socialista, Manuel Hernández, que ha negado que el acuerdo alcanzado lo sea "de legislatura".
La consejera de Hacienda del Ejecutivo local también ha afeado a Vox que "ustedes no creen en la convivencia, que no es integración, porque yo soy española y ceutí de pura cepa como usted.... La división que querían imponer con sus líneas rojas es muy peligrosa para la sociedad ceutí", ha zanjado.
El portavoz del Grupo Popular en la Asamblea, Carlos Rontomé, también ha advertido a los de Santiago Abascal que "cuando tengo que elegir prender la mecha a la ciudad o pactar presupuestos con otros partidos, me quedo con lo segundo", y se ha preguntado si la derecha "sumisa" no es "la que acepta las órdenes de sus líderes nacionales sin más".
El líder de Caballas en la Cámara autonómica, Mohamed Ali, ha alertado de que el interés de Vox por acabar con cualquier subvención a entidades de la comunidad musulmana, feministas o que atiendan a la inmigración "es odio y pretender que esta ciudad salte por los aires".