La investigación sobre los atentados de Barcelona y Cambrils ha dado un nuevo giro en las últimas horas y ya no sólo se centra en buscar al único yihadista de la célula terrorista fugado, Younes Abouyaaqoub. El foco está ahora en el imán de Ripoll, Abdelbaki Es Satty, un hombre a quien la Policía investiga por haber sido el responsable de radicalizar a los jóvenes terroristas de Cataluña.
Según fuentes de la lucha antiterrorista, Satty estuvo en la cárcel hasta el 5 de enero de 2012. Tal y como han explicado a Vozpópuli, el investigado dejó de ser imán debido a su radicalización y estuvo relacionado con otros yihadistas que estaban siendo monitorizados por las fuerzas y los cuerpos de Seguridad del Estado. Alguno de ellos, informan las fuentes, estaban siendo investigados dentro de la 'Operación Chacal', por la que fueron detenidos en 2006 en Vilanova i la Geltrú (Barcelona) acusados de reclutar a jóvenes para enviarlos a Irak e iniciarlos en la lucha terrorista.
Relación con el 11-M
La Audiencia Nacional condenó a varios años de prisión a los presuntos 'muyahidines' (como se designa a los reclutados para atentar): Omar Nachka, Mohamed Mrabet Fashi, Saffet Karakoc, Djmel Dahmani y Redouan Ayach.
El primero de ellos, considerado como líder de la célula, estaba acusado de ayudar a huir de España al autor material de los atentados del 11-M en Madrid, Mohamed Belhadj, proporcionándole un pasaporte y 700 euros para que pudiera escapar.
Otro de ellos, Mrabet, mantuvo como trabajador en sus establecimientos a un joven argelino llamado Belgacem Bellil, que murió inmolándose perpetrando un atentado suicida contra el cuartel de los Carabineros italianos en la ciudad de Nasiriya, el 12 de noviembre de 2003. Algunos medios de comunicación dicen que el suicida fue compañero de piso del imán, aunque no hay confirmación oficial.
Pero, pesar de la condena de la Audiencia Nacional a los acusados, en 2011 el Tribunal Supremo admitió el recurso contra los jóvenes de la 'Operación Chacal' y los puso en libertad, tal y como refleja la sentencia publicada en su página web.
Muerto en la explosión de Alcanar
Ahora, la Policía a encontrado el ADN del ex imán de Ripoll entre los escombros del chalet de Alcanar, donde los terroristas de Barcelona y Cambrils se preparaban con gran cantidad de explosivos y bombonas de butano para un ataque mucho mayor. Una explosión no controlada y anticipada al manipular estos materiales mató a dos personas en el edificio. La investigación policial que comenzó sobre lo ocurrido precipitó a los terroristas a llevar un ataque más inmediato y diferente al que planificaban originalmente, por lo que atacaron atropellando a los viandantes en Las Ramblas de Barcelona y luego en Cambrils.
Este sábado, los agentes han registrado la vivienda del imán, donde han recogido muestras de ADN que han coincidido con las halladas en Alcanar. Y allí, precisamente en ese edificio, han vuelto a realizar detonaciones controladas de los materiales explosivos peligrosos que allí quedaban.
Ahora, los Mossos d'Esquadra intentan determinar si tras su llegada a Ripoll en 2015, el imán fue el responsable de la radicalización de los terroristas de Cataluña y si era él quien encabezaba la célula.