El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, han frustrado recientemente el último intento de Podemos por elegir al próximo embajador en Argentina en sustitución del diplomático Javier Sandomingo, según desvelan fuentes diplomáticas a Vozpópuli. Precisamente, el jefe del Ejecutivo tiene previsto iniciar este miércoles una visita oficial de dos días al citado país sudamericano.
La formación morada volvió a reclamar la Embajada española en Argentina para uno de los suyos "hace unas semanas", cuando Pablo Iglesias aún estaba dentro del Ejecutivo de coalición. Ese movimiento obligó a Exteriores a confirmar la prórroga del mandato de Sandomingo en Buenos Aires, a pesar de que este 2 de junio cumplió cuatro años como jefe de misión en la capital argentina.
Las citadas fuentes sugieren que el bloqueo en el nombramiento de algunos embajadores en destinos como Londres o Bruselas se debe a que los ministros de Podemos se niegan a dar luz verde a las solicitudes de plácet de embajadores 'políticos' próximos al PSOE si no se permite al socio minoritario de la coalición elegir el puesto de Buenos Aires.
Los intentos de Podemos por designar embajadores datan de las negociaciones para apoyar la moción de censura de Sánchez, de la que se ha cumplido tres años hace unos días. En aquel momento, el partido morado entregó al PSOE una lista de embajadas susceptibles de ser dirigidas por personas afines al partido de Iglesias. Pero aquella lista quedó en papel mojado.
Tras las elecciones del 10-N hubo intentos de Podemos por colocar algunos 'peones' en Exteriores, sobre todo al frente de la Cooperación Internacional, pero tampoco fructificaron pues la política exterior no fue troceada y quedó en su totalidad bajo el paraguas del PSOE.
Los socialistas aprovecharon esa situación para seguir nombrando embajadores 'políticos'. Primero se mantuvieron a los elegidos tras la moción de censura: el exalcalde socialista de Lérida Ángel Ros (en Andorra), el exdirigente valenciano Juan Andrés Perelló (en la Unesco) y el exmiembro de la Ejecutiva del PSOE Manuel María Escudero (en la OCDE).
Tras la constitución del Gobierno de coalición, le siguieron otros dos nombramientos ajenos a la Carrera Diplomática: el de la exministra de Sanidad Carmen Montón en la Organización de Estados Americanos (OEA) y el 'desconocido' Ángel Martín Peccis, de quien luego se supo, gracias a una exclusiva de Vozpópuli, que fue una elección impuesta por José Luis Ábalos a Laya en el Consejo de Ministros fruto de la amistad que se profesan el ministro de Transportes y el hasta entonces director de la oficina de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) en Colombia.
Laya sacó a concurso la plaza de embajador en Argentina. Sandomingo empezó a preparar las maletas y presentó su candidatura para dirigir el consulado en Miami pero la ministra dio marcha atrás
Sánchez baraja ahora colocar a algún embajador 'político' más. Laya subraya desde hace semanas, a quien le pregunta por la sorprendente vacante de Londres, que se trata de una decisión personal del jefe del Ejecutivo, lo que abona la tesis de que esa embajada puede caer en manos de un ministro que salga del Gobierno en la próxima remodelación o de alguien a quien el presidente quiera recompensar por los servicios prestados. Pero Podemos se resiste a ello si no le deja la Embajada en Argentina.
Así se lo ha transmitido el diputado hispano-argentino Gerardo Pisarello a varios colegas de la bancada del PSOE en la Cámara baja, según las citadas fuentes. En Podemos hay otro dirigente con raíces argentinas, Pablo Echenique, quien en los últimos días ha borrado miles de tuits. No es la primera vez que el político morado hace limpieza de mensajes. En diciembre de 2019, cuando se estaba negociando el gobierno de coalición entre PSOE y Unidas Podemos, Echenique borró más de 9.000 mensajes dejando solo 200 en su perfil, lo que hizo despertar las sospechas de un hipotético nombramiento dentro del Gobierno.
El embajador Sandomingo fue nombrado en junio de 2017 por el Ejecutivo de Mariano Rajoy cuando Mauricio Macri aún estaba en el poder. A lo largo de su carrera diplomática se le ha etiquetado como afín al PSOE. Aún así, cuando Alberto Fernández llegó a la Casa Rosada a finales de 2019, en círculos 'kichneristas' se dio por sentado el relevo del embajador español.
Y esa fue la impresión que se llevaron en Buenos Aires cuando Laya sacó a concurso la plaza de embajador en Argentina en el denominado 'bombo', el reparto de puestos en el exterior para los diplomáticos. Sandomingo empezó a preparar las maletas el año pasado y tras el verano presentó su candidatura para dirigir el Consulado español en Miami (EEUU), donde esperaba que discurriera plácidamente su último destino diplomático ya que se jubilará en enero de 2024 al llegar a los 70 años. Pero la ministra de Exteriores dio marcha atrás y le prorrogó su mandato en Argentina ante la sorpresa del propio embajador y de la Casa Rosada.
La primera negativa a Podemos
Las citadas fuentes señalan que aquel giro inesperado fue la primera negativa en firme de Sánchez y Laya ante un Iglesias que presionaba por colocar a uno de los suyos en Argentina, principal referente político para Podemos tras varios reveses electorales en la región.
A Buenos Aires se mudó el jefe de Gabinete de Iglesias, Pablo Gentili, para trabajar en el Gobierno 'kichnerista' de Fernández. Y en la capital argentina tiene su centro de operaciones Alfredo Serrano, el economista que trabajó para Nicolás Maduro -quien le llamaba "el Jesucristo de la economía"- y que ayudó a Jordi Évole a entrevistar al presidente venezolano en febrero de 2019. Así que es un país que Podemos tiene entre ceja y ceja.