La mayoría de titulares relacionados con Wagner, la compañía de mercenarios próxima al Kremlin y a Vladimir Putin, se centran en las campañas militares que desarrollan actualmente en Ucrania. Estos contratistas, no obstante, llevan años articulando sus ofensivas mediante tácticas denunciadas por la comunidad internacional en otros escenarios marcados por la convulsión. Ese es el caso del Sahel africano, región de máxima prioridad de España, donde Wagner ha fortalecido su presencia, según alerta el Departamento de Seguridad Nacional (DSN) en un informe. Sus lazos con los gobiernos africanos, incluso, ha llegado a poner en riesgo algunas de las misiones en las que están desplegadas las tropas españolas.
"Crece la presencia de Rusia con una agenda de desestabilización y fomento de un sentimiento anti-occidental, y aumenta el despliegue del grupo paramilitar ruso Wagner para luchar -con procedimientos denunciados por Naciones Unidas- contra las milicias yihadistas", indica el DSN en su informe anual, en referencia a las inestabilidades que se viven en el Sahel africano.
Cabe recordar que desde esferas diplomáticas y de seguridad se considera al Sahel como la "frontera avanzada" de España. Tal es la proximidad geográfica de estos países respecto al nuestro que las amenazas que se desatan en la región afectan directamente a la seguridad nacional española: presencia de organizaciones yihadistas y organizaciones criminales que apuntan directamente hacia Europa y que hostigan los flujos migratorios ilegales rumbo a nuestro país, en una actividad delictiva que se cobra sus principales víctimas entre los propios inmigrantes.
A ese cóctel difícil de gestionar se le suma ahora la presencia de mercenarios de Wagner. Muchos de los países del Sahel se han echado en brazos de los contratistas próximos a Putin, toda vez que les prometen una ofensiva militar total contra yihadistas o criminales, tanto con efectivos militares como con armamento de diversa envergadura. Numerosos estudios aseguran que Wagner -y en última instancia, el Kremlin- se benefician de este apoyo militar al acceder a preciados recursos naturales o, directamente, con el abono de cuantiosas sumas de dinero.
El mapa de Wagner en África
Esa es la situación que actualmente se vive en Mali. La aproximación a Wagner del gobierno de Bamako, liderado por militares malienses, ha sacudido la frágil estabilidad diplomática de la zona. La Unión Europea ha suspendido la misión de adiestramiento e instrucción a las tropas locales que venía desempeñando en los últimos años y que actualmente dirige un general español. Este despliegue tenía por objetivo dotar a las fuerzas locales de los medios necesarios para combatir las amenazas, al entender que de ese modo se alcanzarían metas más duraderas en cuestión de seguridad.
Los aliados occidentales han detectado una creciente presencia de los mercenarios de Wagner en otros países del Sahel -aunque la mayoría de éstos lo nieguen-
Asimismo, los aliados occidentales han detectado una creciente presencia de los mercenarios de Wagner en otros países del Sahel -aunque la mayoría de éstos lo nieguen-. Hay indicios de que así haya ocurrido en Burkina Faso, clave para la estabilidad de la región, en Níger o en República Centroafricana.
"Esta crisis multidimensional del Sahel afecta de manera directa a los intereses de Europa y de España, especialmente en lo que se refiere a la amenaza terrorista y a los flujos migratorios irregulares; y la situación en la región se ha agravado por el impacto global del conflicto en Ucrania", incide el DSN en su informe. "La inestabilidad política, el subdesarrollo económico y la degradación de la seguridad marcan la situación actual en el Sahel Occidental, donde la zona de las tres fronteras (Mali, Níger y Burkina Faso) se mantiene como punto de mayor violencia y fricción entre distintos grupos armados; entre ellos, los terroristas yihadistas".
Presencia militar española
El DSN recuerda que el G5, como se conoce a la plataforma que reúne a los cinco países del Sahel Occidental -Mauritania, Mali, Burkina Faso, Níger y Chad- atraviesa "un momento delicado", en especial por la retirada unilateral de Mali, con creciente influencia de Rusia.
Por su parte, España mantiene presencia militar en todas las misiones de la Unión Europea en África, al considerarla como una región de interés prioritario; o, dicho en otras palabras, su "frontera avanzada". Militares españoles están en zonas de operaciones como Mali, República Centroafricana, Mozambique o Somalia, además de Senegal y Yibuti -con medios aéreos- o las aguas del Índico -con presencia naval de lucha contra la piratería-.
Espacios donde se libra una batalla que acapara menos titulares que la guerra de Ucrania, pero que es prioritaria para España en particular -y la Unión Europea en general-, y en la que Rusia toma posiciones a través de sus mercenarios de Wagner.
Tamuda
La coalición de países de la UE liderada por Francia, no se fue del Sahel. La echaron porque tras casi 10 años de intervención, no consiguieron ningún resultado. En lugar de perseguir a los bandidos, se dedicaban a instruir a personal local que lo más común es que se pasaran con los bandidos a la primera de cambio. Los militares de la coalición, ni pisaban el terreno, ni combatían ni hacían más que de figurines en Bamako. Unos funcionarios como los de la Otan. Hartos del fracaso, los gobiernos de los países afectados decidieron largarlos de allí y confiar en los Wagner, que son soldados de verdad que van a luchar, perseguir y derrotar al enemigo. Un enemigo, que no creamos todo ese cuento de “Estado Islámico, amenaza global, enemigo peligrosísimo,” etc. No son más que bandoleros de medio pelo, equipados con material de desguace, pero que aterrorizan a campesinos y ganaderos en los pueblos y aldeas, a los que saquean. Pero claro, si no los combates de verdad en el terreno, seguirán creciendo. Esto es el gran fracaso de la UE como potencia militar, un humillante fracaso, de unas naciones que han destruido su cultura de defensa y sus capacidades militares y ya, ni siquiera son capaces de combatir contra un puñado de ladrones de mala muerte. El hueco, sin duda, lo está rellenando Rusia, y ahora empezaremos a ver montones de artículos en los que se hablará con pelos y señales, de los “crímenes y atrocidades que cometen las brigadas Wagner”. Y muchos de Vds. se lo creerán. La reacción de los débiles.
Romano
Un artículo intoxicante, ridículo, alarmista, indocumentado. Decir que el Sahel es la frontera sur de España es para morirse de risa. Además está por medio Marruecos que es el peón de Biden y está armado por él y por los judíos. El único problema es el peligro que corren nuestros soldados de las unidades militares desplazadas en Mali. Esos si están expuestos a la muerte. Pero hay mucho Sahara por medio para llegar a Ceuta y Melilla.
Thermidor
Espero que lleguen a Ceuta, Melilla, y se den un paseo por Gibraltar. Seguro que las defienden mejor que nuestro gobierno.
maesenicolas
No hay problema. En caso de necesidad se pide ayuda a Turquía cuyos servicios secretos han demostrado ser más eficientes que los nuestros.