El Sindicato Unificado de Policía (SUP) ha recibido esta mañana una nota de la Dirección Adjunta Operativa de la Policía (perteneciente al Ministerio del Interior) que dice lo siguiente: “Siguiendo instrucciones del Director Adjunto Operativo, no se permitirán concentraciones (escraches) a menos de trescientos (300) metros de los domicilios de autoridades y personalidades políticas en el ámbito competencial del Cuerpo Nacional de Policía (...)”
Sin embargo, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha negado esta tarde de forma “tajante” que su departamento haya ordenado a los agentes de policía prohibir las concentraciones a menos de 300 metros del domicilio de los políticos.
¿Qué ocurre? ¿Cómo es posible que el ministro del Interior niegue la existencia de una directiva que se había emitido esta misma mañana? Desde el SUP denuncian que lo que ocurre en Interior es que reina el caos y no hay comunicación entre el ministro, el secretario de Estado de Seguridad y el director general de la Policía. En este sentido, fuentes del SUP señalan que “es posible que el ministro no se haya enterado de la existencia de esa orden debido a la falta de comunicación”.
Para el SUP, todos estos hechos y anuncios mediáticos lo único que hacen es “crear confusión entre la ciudadanía y la policía” ya que estas medidas de alejamiento son “manifiestamente ilegales”. Este sindicato de policía considera que la legalidad vigente no puede ser ignorada “para impartir instrucciones que puedan conducir a actuaciones ilegales, como detenciones sin cobertura legal, que, además del bien jurídico lesionado, suponen un grave riesgo para la seguridad jurídica de los policías”.
Fuentes del SUP explican que, de seguir las órdenes recibidas “a nosotros nadie nos garantiza que estas actuaciones no vayan a tener consecuencias jurídicas graves para los policías”. Y añaden que “nosotros ya somos policías y sabemos cuándo tenemos que actuar”.
Desde el SUP recuerdan que “solo la autoridad judicial es competente para establecer zonas de alejamiento o impedir la libre circulación de personas por las vías de un país democrático, y España lo es”. En este sentido, entienden que las noticias de hoy “que pretenden establecer círculos vedados a la ciudadanía a su derecho de circulación son inaceptables”. Y rematan su nota con una frase demoledora: “Referirse a la inviolabilidad del domicilio a 300 metros de distancia es ignorancia dolosa”.
