El Jazmine es un barco con historia que casi se hunde en el puerto de Aguilas (Murcia) donde ha permanecido más de 15 años atracado. La nueva Ley de Puertos murciana que agiliza los embargos de los barcos ha permitido al Gobierno regional resolver un problema, pues el yate se estaba escorando con peligro de hundimiento.
Hace algunos meses tuvo que intervenir Salvamento Marítimo, a instancias de la Consejería de Fomento e Infraestructuras. Realizaron trabajos de inspección y descontaminación del yate para identificar los elementos peligrosos e inflamables y evitar posibles fugas. Se sellaron puntos donde había peligro.
Su historia comenzó cuando en el año 1963 Richard Burton se lo regaló a Elisabeth Taylor. Dicen las crónicas de aquellos tiempos que a Liz le encantaba, para disfrute de la tripulación, pasearse por su cubierta vestida únicamente con un sombrero para que no le diera el sol en la cabeza. Sus camarotes han sido testigo de grandes viajes y de la pasión de dos de los grandes del cine que se casaron dos veces y se separaron otras dos.
A Liz le encantaba, para disfrute de la tripulación, pasearse por su cubierta vestida únicamente con un sombrero para que no le diera el sol en la cabeza. Sus camarotes han sido testigo de grandes viajes y de la pasión de dos de los grandes del cine que se casaron dos veces y se separaron otras dos"
Burton, tras su segundo divorcio de Liz Taylor, decidió vender el barco. Al final terminó en manos de unos traficantes que fueron detenidos por la Guardia Civil y la nave quedó aparcada en Santa Pola y de ahí navegó hasta Aguilas. La empresa propietaria no contestó las constantes requisitorias y multas de la autoridad murciana y el barco llegó a sufrir un incendio.
La Agencia Tributaria procedió a la subasta y la historia de amor por los siete mares de Burton y Taylor fue adquirida por un empresario que ha pagado hace algunos meses el amarre desde que le fue adjudicado. Ha trasladado el barco a Garrucha, en Almería, donde ya trabajan hace semanas.
El trabajo va a ser duro. El casco esta carcomido por el oxido, los motores son viejos, los sistemas de navegación obsoletos ,al igual que las comunicaciones… “Necesita un buen repaso”, ha explicado a este periódico un entendido en este tipo de buques.
El casco esta carcomido por el oxido, los motores son viejos, los sistemas de navegación obsoletos ,al igual que las comunicaciones… “Necesita un buen repaso”
El proceso para vender el barco ha sido largo y farragoso, y ha durado más de 15 años, El director general de Transportes, Costas y Puertos, Salvador García-Ayllón, dictó una resolución de urgencia para solicitar al propietario del yate, de 34 metros de eslora y 2.600 caballos de potencia en sus viejos motores, que retirara el barco del puerto “porque estaba muy deteriorado y con peligro de hundimiento”, según explicaron en la Consejería de Fomento.
No se conoce el objetivo del nuevo propietario. Hace años que un empresario quiso comprarlo para alquilarlo y navegar con el reclamo de que había sido el yate del amor de Elisabeth Taylor.