"Parece que hay ganas de encontrar fallos técnicos entre las distintas administraciones, pero la verdad, de lo que hemos visto, no se ha encontrado nada relevante", dice a Vozpópuli Javier Fernández, del equipo de técnicos de Salud Pública de la Comunidad de Madrid, sobre la gestión técnica que han hecho el Ayuntamiento de Sevilla y la Junta de Andalucía del brote de listeriosis.
"De acuerdo a la documentación que manejo, no he detectado nada relevante. Ha funcionado todo muy bien y no he escuchado a ningún compañero decir lo contrario", incide Fernández, que es también una voz representante del Sindicato de Técnicos de Salud Pública.
Toda la gestión técnica se ha hecho en un tiempo razonable"
Atendiendo a la voz experta, que pasen "algunos días" entre los primeros casos de una enfermedad y la inspección que cierra la fábrica del producto es algo "que parece que es mucho pero es lo normal, no algo técnicamente llamativo ni preocupante".
"Los cultivos requieren un tiempo y los técnicos no operamos con cosas altamente acotadas, sino con certezas. Cuestiones como los errores de etiquetado pueden ocurrir, son fallos y se deberán depurar, pero son cuestiones realmente menores, creo honestamente que ha habido mucha cosa tendenciosa en el tratamiento de la información sobre lo que ha pasado", dice el experto.
"La información que tenemos nosotros es que los veterinarios de la Junta de Andalucía han intervenido en cuanto se ha detectado el brote. Se ha requerido la trazabilidad del producto a la empresa, y en el momento en el que se ha tenido confirmación real de que el producto tenía listeria, se ha comunicado la alerta a todas las comunidades donde podía estar el producto. Todo, además, según la información que barajamos, se ha hecho en un tiempo razonable desde el punto de vista técnico", asegura Fernández.
Peleas políticas y una empresa responsable
A su juicio, "bien es cierto" que el consejero de Salud andaluz, Jesús Aguirre, "se ha expresado mal, ha mostrado desconocimiento a la hora de comunicar las cosas" y la ministra de Sanidad, María Luisa Carcedo, "de un partido distinto a sus pares de la Junta, con sus silencios, sus dudas, ha adoptado una actitud cicatera".
"Quizá si fueran ambos de un mismo partido, no se habrían despertado tantas dudas entre unos y otros", dice Fernández.
Quizá si en la Junta de Andalucía gobernara el PSOE, Carcedo no habría emitido esos silencios que despiertan dudas"
En cualquier caso, lo "más probable" en su visión es que el brote derive de una "mala práctica de manipulación en la empresa (Magrudis)", que, recuerda, "está legalmente constituida desde el punto de vista sanitario".
"La contaminación, a buen seguro, se produjo en el momento en el que el producto está listo para ser envasado y ya no pasa por un proceso de cocción. Fue entonces donde pudo haber influido un mal estado de las instalaciones de la empresa y se produjo a buen seguro una contaminación cruzada".
En la misma línea, este experto afirma que, de ahora en adelante y retirado ya el producto, pueden producirse casos por "contaminación cruzada", como ha alertado el ministerio de Sanidad, pero que no es un asunto que debería tener mayor recorrido. "Lo lógico es que los establecimientos por los que pasó la carne y se retiró hayan tomado ya las medidas correspondientes para prevenir cualquier infección, como en cualquier otro caso; lo fundamental, en cualquier caso, es que el producto contaminado ya está fuera de circulación".