José Ramón Romero, el hermano de la auxiliar de enfermería Teresa Romero que se contagió de ébola, ha afirmado este domingo que "está perfecta" y "muy bien" tras su traslado el sábado a planta, después de permanecer casi un mes en aislamiento, y ha dicho que ahora le "toca recuperarse".
En declaraciones a los medios en la puerta del Hospital Carlos III, no ha confirmado la fecha en la que Teresa Romero podría recibir el alta definitivo y ha reiterado que se encuentra "muy bien" después de que este sábado los médicos decidieran trasladarla a planta al constatar en los últimos análisis que en sus fluidos corporales no quedan signos de ébola.
El hermano de la auxiliar de enfermería ha indicado que los médicos no han precisado cuándo podrá salir del hospital y ha añadido que tampoco han comentado a la familia si el pulmón que resultó afectado como consecuencia de la enfermedad está totalmente curado.
Ha comentado que "ha comido menos" que este sábado y que su madre, que se encuentra en Becerreá (Lugo) le telefonea constantemente, aunque ha indicado que no sabe si vendrá a verla. Preguntado por si Teresa quiere salir ya del hospital, ha respondido que "como loca" y ha añadido que añora ir a su pueblo natal, Becerreá, para allí "recuperarse". Además, ha explicado que, desde este sábado, Teresa ha recibido principalmente la visita de su marido, Javier Limón, y de amigos y compañeros de trabajo.
La auxiliar de enfermería continuará ingresada en una habitación convencional de la planta quinta del hospital, donde seguirá en observación rutinaria, según informó ayer el equipo médico que la atiende en el centro sanitario. Los resultados de las pruebas confirmaron que ya no hay presencia del virus en sus fluidos corporales lo que ha permitido poner fin al aislamiento en que se encontraba desde el pasado 6 de octubre, cuando ingresó en el hospital enferma de ébola.