En la calle del Císter, en una de las zonas más aburguesadas de Barcelona muy próxima a la avenida Tibidabo, aguardan varios retenes de periodistas y el trajín de curiosos que observan la placa de Teyco en la entrada principal es incesante desde el pasado viernes. Muchos se preguntan cómo es posible que una empresa fundada en 1963 para gestionar suelo y construir haya aparecido en el centro de las sospechas por corrupción política que afectan al nacionalismo catalán. Mucho tiene que ver que la constructora haya diversificado su negocio en las últimas décadas para acercarse a la política actuando como adjudicataria de obra pública en ayuntamientos catalanes gobernados, precisamente, por el nacionalismo convergente.
Todo saltó el pasado viernes, cuando un importante operativo de la Guardia Civil efectuaba bajo orden judicial diferentes registros en varias localidades de Cataluña para obtener supuestos indicios de la financiación ilegal de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC), el partido que preside Artur Mas y que está en el ojo del huracán de una trama de corrupción.
Teyco vendió su sede social en Barcelona
Tras los registros, el nombre de la constructora e inmobiliaria Teyco, fundada por la familia Sumarroca y que el año pasado vendió su antigua sede social de 1963 situada en un palacete de la avenida Tibidabo para hacer caja y reducir deudas, volvía a ser protagonista por supuesta financiación ilegal de CDC. Y no saltaba el nombre de Teyco en los titulares de la prensa del viernes pasado por haber refinanciado su deuda y haber segregado sus negocios de gestión del suelo e inmobiliario, sino por formar parte presuntamente de la financiación irregular de CDC.
Según fuentes conocedoras de los documentos incautados por la Guardia Civil, Convergéncia pudo recibir hasta un total de 300.000 euros de Teyco en concepto de comisiones por la adjudicación de obras en los distintos municipios catalanes gobernados por el partido nacionalista, hoy convertido al independentismo e integrado en la lista electoral Junts pel Sí. Esta cantidad abonada podría suponer una comisión del 3% de obras adjudicadas a la constructora de la familia Sumarroca –cuyo patriarca formó CDC junto con Jordi Pujol- por valor de casi 11 millones de euros.
Convergéncia pudo recibir hasta 300.000 euros de Teyco en concepto de comisiones por la adjudicación de obras, según fuentes de los documentos incautados de la Guardia Civil.
Supuesto pago de comisiones
Teyco ha negado, por su parte, haber pagado comisiones a CDC a cambio de contratos de obra pública con la Generalitat y las alcaldías catalanas han asegurado que ninguna de las aportaciones que ha hecho a fundaciones de partidos han tenido "fines ilícitos". "Las aportaciones se realizaron de forma legal y transparente, acorde a todos los mecanismos de control y límites que establece la ley y fueron motivadas por la sensibilidad de la empresa", ha expuesto la constructora.
Mientras la investigación judicial continúa analizando la documentación incaudata por la Benemérita, los empleados que siguen trabajando en Teyco acuden a la calla Císter con caras de preocupación y no realizan declaraciones a los periodistas, pero son conscientes no sólo de la investigación judicial por corrupción política sino de las dificultades financieras por las que han pasado en la empresa en los últimos cinco años, en plena crisis económica que ha golpeado al sector de la construcción en toda España.
Como hecho destacable en cuanto a la situación financiera de Teyco, la constructora –que emplea a 244 personas y facturó 74 millones en 2014- alcanzó el pasado mes de julio un acuerdo de reestructuración de su deuda, para reducirla de 36,9 millones a 13,2 millones de euros. Este es el hecho más destacable de la empresa para seguir con su negocio y evitar la quiebra como otras empresas constructoras.
El objetivo de ese acuerdo, de la que es consejero delegado Jordi Sumarroca, fue "marcar un nuevo calendario de amortizaciones que permitirá liquidar toda la deuda hasta el año 2021". La empresa anunciaba así la refinanciación de su deuda: "En un tiempo récord, Teyco ha completado con éxito un acuerdo de reestructuración de su deuda, pasando a ser una de las empresas constructoras medianas más solventes del sector", espetó en un comunicado.
Refinanciación de la deuda
La reducción de la deuda, según informan a Vozpópuli fuentes financieras, permite una importante reducción del stock de gestión de suelo de la empresa, también ha servido para bajar los costes financieros en 200 puntos básicos. Gracias a la refinanciación, la empresa ha conseguido separar de su balance el negocio inmobiliario, aunque se sigue apostando por él.
Teyco dispone de unos fondos propios de 29,5 millones de euros y "un bajo nivel de endeudamiento
En la refinanciación de la deuda de Teyco han intervenido las entidades bancarias BBVA, Sareb, Caixabank, Banco Santander, Sabadell, Popular y Novobanco y ha sido asesorada financieramente por Deloitte, Garrigues y KPMG .
Según informa Teyco, la compañía dispone de unos fondos propios de 29,5 millones de euros y "un bajo nivel de endeudamiento, que pretende abordar un ambicioso Plan de Negocio a 6 años que tiene como objetivo consolidar el mercado nacional, seguir creciendo en el exterior y potenciar la innovación como valor competitivo diferencial". En el ejercicio de 2014, Teyco ya registró un incremento de la actividad apoyado en una incipiente mejora del sector, lo que se ha traducido en nuevas adjudicaciones y contratos para los próximos años que permitirán a la empresa mantener un ritmo de crecimiento superior al 5% .
Durante este 2015 Teyco ha diversificado su oferta de servicios potenciando la implantación de lo que la firma denomina sistema TAS (Teyci Advanced Systm) con dos proyectos que suman un total de ocho millones de euros. Se trata de un proceso propio de construcción industrializada más rápido, económico y sostenible. También ha impulsado la implantación de proyectos de eficiencia energética que se autofinancian, de modo que se elimina el pago inicial de la instalación para que las empresas puedan costearlo con los ahorros generados durante el primer año.
En la división Internacional, la facturación en el 2014 fue de 6,8 millones de euros equivalentes al 9,1% del negocio total y se concentró en los mercados consolidados de Francia y Panamá. Teyco tiene como objetivo para los próximos años que éste área alcance el 25% de la facturación total de la compañía, potenciando la presencia de la compañía en otros mercados europeos y de Centroamérica.
La historia de Teyco se remonta al año 1963 donde inició su actividad de construcción de obras a terceros, actividad a la que más tarde se sumaría el desarrollo de promociones propias. La empresa contó con un núcleo duro de fundadores iniciales: Joaquim Sumarroca, junto a sus hermanos Pere y Carles Sumarroca siendo Joaquim –actual presidente honorífico- el que llevó las riendas de la empresa catalana.
Desde la primera década de este siglo, la compañía busca mercados en el exterior aprovechando el buen desarrollo de las grandes economías, sobre todo en Latinoamérica y Centroamérica. En paralelo, en España la empresa de los Sumarroca aprovechó la bonanza del boom inmobiliario y de las administraciones públicas, básicamente la local mediante adjudicaciones públicas, para desarrollar diversos proyectos municipales de destacada envergadura. Es en este último punto donde se centra actualmente la investigación judicial de un juez en El Vendrell (Tarragona) por supuesta financiación irregular de Convergència Democràtica (CDC), centrando las pesquisas en busca de pruebas fehacientes.
En la división Internacional, la facturación en el 2014 fue de 6,8 millones de euros equivalentes al 9,1% del negocio total y se concentró en los mercados consolidados de Francia y Panamá. "Teyco tiene como objetivo para los próximos años que éste área alcance el 25% de la facturación total de la compañía, potenciando la presencia de la compañía en otros mercados europeos y de Centroamérica", aseguran desde la constructora.