Es uno de los ex responsables policiales condenados por los GAL y, pese a ser indultado posteriormente, su nombre quedó manchado para siempre por la llamada 'guerra sucia' contra ETA. Al recibir la llamada de Vozpópuli, Rafael Vera se muestra reticente inicialmente a hacer declaraciones: "Me ha producido mucho disgusto y asco ver cómo se ha vuelto a sacar a la luz esto de la 'guerra sucia'. Es un tema que está muerto y ya fue juzgado".
Tras las suspicacias iniciales, el ex secretario de Estado para la Seguridad comienza a desahogarse y permite ser entrevistado. Termina hablando alto y claro sobre el informe desclasificado de la CIA y la ofensiva de Bildu, apoyada por PNV, ERC, JxCat la CUP, BNG y Podemos para investigar en sede parlamentaria el presunto papel del expresidente Felipe González en los GAL. Una comisión de investigación vetada esta semana por PSOE, PP y Vox en el Congreso, y que los abertzales y nacionalistas intentan impulsar ahora en el Senado.
"Felipe González no es la 'X' de los GAL, lo puedo decir con rotundidad", señala Rafael Vera en declaraciones a este periódico. "A estas alturas no me preocupa decir nada. Se me quiso colocar en la bóveda de aquella 'guerra sucia' y lo que acabó quedando acreditado después del proceso judicial es que yo fui precisamente quien acabó con eso", añade.
"El PSOE actual está coartado y coaccionado por sus socios, y creo que eso le impide dar una respuesta contundente a esta iniciativa. Me refiero a Podemos y a ERC, pero también a Bildu"
Su voz es la de un hombre decepcionado con la situación política actual y con el PSOE de Pedro Sánchez, que, según sus palabras, ha reaccionado de forma "tímida" a la ofensiva parlamentaria de Bildu, PNV, ERC y Podemos para "resucitar" los GAL.
"El PSOE actual está coartado y coaccionado por sus socios, y creo que eso le impide dar una respuesta contundente a esta iniciativa. Me refiero a Podemos y a ERC, pero también a Bildu, con quien han llegado a acuerdos puntuales a pesar de que, hasta donde yo recuerdo, todavía no han condenado ni pedido perdón a la sociedad vasca y española por los casi mil muertos provocados por ETA", indica Vera.
"A mi me gustaría recordar a los dirigentes socialistas de hoy que muchos de los políticos asesinados eran precisamente del PSOE. Lo que hubiese esperado es que, además de vetar la investigación en el Congreso, el PSOE de Sánchez hubiera reaccionado a la propuesta de Bildu exigiendo una comisión de investigación por los más de 350 asesinatos de ETA que aún no han sido esclarecidos", indica.
La 'X', Damborenea y Barrionuevo
Como hoy hace Vera en Vozpópuli, el pasado domingo el expresidente de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, criticó a "aquellos que desde las filas socialistas están tirando piedras contra la honorabilidad de Felipe González".
En un artículo en El País, Rodríguez Ibarra terminaba diciendo: "Si quieren llegar a la verdad, en lugar de difamar, consulten con personas que, en aquellos tiempos en aquellos tiempos tan convulsos y en aquellos años de plomo, colaboraron estrechamente con el entonces secretario general del PSE, Ricardo García Damborenea".
"Respeto profundamente la opinión de Rodríguez Ibarra, pero yo no voy a apuntar hacia nadie", indica Rafael Vera al ser preguntado por ese artículo. "Damborenea era un hombre valiente que en los peores años siempre dio la cara sobre el terreno. En la vida política en el País Vasco de aquellos años, aparte del nacionalismo, solo existía el PSE. Por eso mataron a Enrique Casas, le asesinaron para amenazar al Gobierno del PSOE y que nos mantuviésemos al margen del País Vasco", afirma.
"Esta investigación la están moviendo los malos. Me duele que hayan impuesto su narrativa y que a estas alturas parezca que todos eran iguales. ¡No! Unos mataban y asesinaban y los otros tratábamos de impedirlo"
Como viene sosteniendo desde hace más de veinte años, Vera asegura que nunca hubo una 'X' en los GAL. "Está demostrado que la 'guerra sucia' venía desde la época del franquismo y se mantuvo durante el Gobierno de la UCD a través de grupos como la Triple A o el Batallón Vasco Español", añade.
"El juicio se intoxicó mucho por la política y el juez Garzón se vio influenciado por esas intromisiones políticas que quisieron buscar en el 'Sr. X' el vértice de un supuesto triángulo que nunca existió", asegura Vera a este periódico. "Y ya se sabe que cuando la política entra en la Justicia, la justicia sale por el balcón".
"Quienes están moviendo esto son los malos"
"Asco". Esa es la palabra que utiliza el exsecretario de Estado de Seguridad Interior para definir la ofensiva de Bildu en el Parlamento la investigación contra Felipe González. "Hablemos primero de los 350 muertos cuyos asesinatos a manos de ETA aún están por esclarecer", señala Vera.
"Esta iniciativa la están moviendo los malos. Me duele que hayan impuesto su narrativa y que a estas alturas parezca que todos eran iguales. ¡No! Unos mataban y asesinaban y los otros tratábamos de impedirlo. Esto está motivado por las elecciones vascas y no hay ningún interés por la búsqueda de la verdad", señala Vera.
"La verdad es que en aquellos tiempos el ministro Barrionuevo fue el que ordenó la liberación inmediata de Segundo Marey. Yo me adjudico el error de haber ordenado detener en Francia, sin permiso de las autoridades francesas al entonces jefe político y militar de ETA, José María Larretxea Goñi", admite Vera.
La detención de Larretxea y el asesinato de Martín Barrios
Era octubre de 1983. ETA tenía secuestrado al capitán de farmacia Alberto Martín Barrios. "Nos habían dado un ultimátum de 48 horas o si no le iban a matar. Teníamos la ubicación de Larretxea Goñi y detenerle era la única forma de salvar al capitán Martín Barrios. Quisimos detenerlo cometiendo una ilegalidad, tres GEO acabaron detenidos por Francia, que entonces era un santuario para los etarras, y Martín Barrios fue asesinado".
Vera, que por aquel entonces fungía como Director General de la Seguridad del Estado, compara aquello con el secuestro y posterior asesinato, en 1997, de Miguel Ángel Blanco. "Los políticos nunca se movieron hasta que ETA empezó a asesinar a políticos. Me cabrea mucho que, cuando los asesinados eran militares y miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, nunca se quiso confrontar a ETA como se hizo después".
"Cuando volví al Ministerio del Interior en 1984, ya como secretario de Estado de Seguridad y bajo el mando de Barrionuevo, lo que hice fue acabar con esa guerra sucia. Ordené cesar cualquier actividad ilegal e hice lo que pude", señala.
- ¿Cómo es su relación actual con el exministro Barrionuevo?, le pregunta Vozpópuli al término de la entrevista.
"No tengo contacto con él desde hace años. Cuando pasó lo del juicio cada uno nos enrocamos en nuestros propios problemas", señala Vera. "En la política, como usted ya sabrá, no hay amigos".