La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, se quejó a la dirección nacional de Ciudadanos al saber que todo el poder orgánico del partido en la región iba a recaer en Ignacio Aguado y sus fieles. Al final, se pactó in extremis la entrada de Mariano Fuentes, una de sus personas de confianza en el Ayuntamiento, en el nuevo comité autonómico madrileño, según supo Vozpópuli por fuentes próximas a la Ejecutiva de Inés Arrimadas.
Villacís no estuvo en la reunión del Comité Ejecutivo de Ciudadanos que el pasado lunes aprobó los nuevos comités autonómicos. Ello se debió a problemas de agenda porque a esa hora tenía un acto municipal en los terrenos de la antigua cárcel de Carabanchel. Pero con carácter previo trasladó a la dirección su disconformidad con la composición del nuevo equipo naranja en la región. De ahí que se buscase un hueco para Fuentes, concejal en el Ayuntamiento de Madrid al igual que ella y que lleva el área de Desarrollo Urbano.
Esta cesión no ha mitigado el malestar de Villacís, quien en sus redes sociales no ha hecho ninguna mención o felicitación al nuevo comité autonómico que se ha formado en Madrid, a diferencia de la casi totalidad de los dirigentes naranjas allí donde ha habido cambios. Tampoco Fuentes lo celebró en su cuenta de Twitter.
La vicealcaldesa venía de una anterior Ejecutiva madrileña en la que no estaba ni ella ni ninguna persona de su entorno, de ahí que confiaba en que la situación cambiase con el liderazgo de Arrimadas. Tras la debacle electoral del 10-N, Villacís expuso a la nueva dirección naranja la necesidad de cambiar a algunas de las caras del partido en la región.
Su objetivo era que en el nuevo organigrama hubiese figuras afines tanto al vicepresidente regional, Ignacio Aguado, como a ella. Arrimadas sí que ha confeccionado listas de consenso en regiones como Andalucía o Comunidad Valenciana, donde Juan Marín o Toni Cantó no copan todos los puestos en los nuevos comités autonómicos. Todo ello en aras de buscar un equilibrio entre los 'barones' territoriales y sus críticos. Pero no ha sido el caso de Madrid.
En esta comunidad autónoma, Aguado se ha hecho con todas las secretarías que se han repartido. Así, la nueva junta directiva de Cs Madrid queda con Ignacio Aguado de coordinador, Araceli Gómez al frente de Acción Institucional, César Zafra en Organización y Francisco Lara en Comunicación. Los tres son personas próximas a Aguado.
Villacís ha quedado como coordinadora local de Cs Madrid en la capital, pero es la misma función que ya desempeñaba hasta ahora y desde ese puesto no podrá influir en la estrategia del partido. Además, su delfín Fuentes estará en completa minoría dentro del grupo de diez miembros del comité autonómico, entre los que se encuentran el citado Zafra o dirigentes como Miguel Gutiérrez o Ángel Garrido, entre otros. Y no hay que olvidar que todos ellos quedan bajo las órdenes de Aguado por su condición de coordinador regional.
Sorpresa en el PP
El hecho de que Villacís haya quedado arrinconada en Cs Madrid ha sorprendido en las filas del PP madrileño, donde valoran mucho más el tándem que ha formado la vicealcaldesa con el popular José Luis Martínez-Almeida durante la pandemia que la difícil cohabitación de Aguado con Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid.
Las citadas fuentes subrayan a este periódico que Villacís se ha mostrado crítica en los últimos meses con las atribuciones que Arrimadas ha dado dentro del partido al vicesecretario primero, Carlos Cuadrado, de quien dependen áreas tan importantes como Organización, Comunicación o Finanzas.