El excomisario José Manuel Villarejo acude este jueves a la Audiencia Nacional para declarar como testigo ante el juez Manuel García Castellón sobre su versión acerca de la autoría del 11-M, en la que apunta a los servicios secretos marroquíes y franceses como responsables de los atentados.
El excomisario, que lleva 16 meses en prisión preventiva, pidió declarar sobre este asunto al juez a través de una carta en la que aportaba esta nueva versión y de la que el magistrado dio traslado a la Fiscalía de la Audiencia Nacional para que elaborara un informe.
Sin embargo, antes de que la Fiscalía emita ese informe, para cuya elaboración está realizando comprobaciones sobre el relato de Villarejo, el juez ha optado por citar al excomisario y escuchar sus revelaciones sobre la autoría intelectual de la masacre en los trenes de cercanías.
Villarejo declarara en el marco de las diligencias previas sobre los atentados de Madrid que permanecen abiertas, las conocidas como las de los "flecos del 11M" en la que constan perfiles genéticos sin identificar y otros aspectos residuales de la investigación de los atentados.
García Castellón también investigó el 11-M
Se da la circunstancia de que el juzgado de García Castellón, instructor del caso Villarejo, es el mismo que investigó el 11M, por lo que también le ha correspondido este asunto, que, no obstante, se ha querido desvincular del 'caso Tándem'.
Por tanto, a su comparecencia, además del juez, asistirá el teniente fiscal y portavoz de la Fiscalía de la Audiencia Nacional, Miguel Ángel Carballo, según las fuentes consultadas por Efe.
La última vez que Villarejo declaró en enero como investigado en el 'caso Tándem' fue la primera vez que aludió al 11-M.
Lo hizo vinculando esos "luctuosos" acontecimientos con el caso del espionaje en el BBVA, que enmarcó dentro de una "operación de Estado" de mayor envergadura que le fue encargada con el cambio de gobierno tras los atentados.
Antes de conocerse su citación por el 11-M, Villarejo emitió un comunicado a través de su defensa en el que señalaba que había pedido declarar ante el juez para prestar declaración sobre lo que conoció como policía en relación a los atentado "en atención a que se pueda ayudar a esclarecer, por fin, la verdadera responsabilidad y autoría de aquella monstruosidad".
La versión de Villarejo
Según la versión de Villarejo, que ha pedido que el Gobierno desclasifique los documentos oficiales que le vinculen con el 11-M para poder "defenderse", la operación de compra de 200 kilos de explosivos por parte de Jamal Ahmidan, alias El Chino, uno de los autores de los atentados, era en realidad una "entrega controlada" por la Guardia Civil.
Sin embargo, según él, algo salió mal y los yihadistas contaron con "ayuda externa" para burlar la vigilancia y terminar perpetrando el atentado y apunta directamente a encubiertos de la inteligencia francesa.
La defensa Villarejo pidió que la declaración se realizará por videoconferencia debido a los problemas de espalda que sufre el excomisario, pero el juez se lo ha denegado alegando falta de medios técnicos para una declaración tan extensa y de tanta trascendencia.
