Un menú del día casero por solo cinco euros y que incluye primer y segundo plato a elegir, postre, bebida y pan lo ofrece un bar de Málaga, ubicado en el barrio obrero de Huelin, para ayudar a sus clientes a sobrellevar la difícil situación económica y la creciente inflación.
La propietaria del local, Carmen Martín, asegura a EFE que su menú, elaborado a diario con producto fresco y variado, es "el más barato de España" y el secreto es comprar cada día fruta, verdura, carne y pescado al mejor precio en el mercado de abastos de Huelin, situado a escasos metros del bar.
Antes de las 13:00 horas, este local de la calle Emilio de la Cerda se encuentra abarrotado por trabajadores, pensionistas y familias que buscan darse un capricho sin tener que mirar la cuenta corriente después. Aunque los menús se empiezan a pedir a partir de las 13:30, media hora antes todas las mesas ya están ocupadas.
Clientes habituales o primerizos, españoles y extranjeros, abarrotan el humilde local. Los comensales de las trece mesas deben decidir este viernes si se decantan por gazpachuelo, ensalada de lechuga, tomate y atún o macarrones como primer plato.
Para el segundo, Martín juega con los precios. "Si el kilo de sardinas está a tres euros, hoy se come sardinas", explica la propietaria, que afirma que los precios tan bajos tienen "locos de contentos" a "las criaturas", como la restauradora llama a sus clientes.
Martín, que hasta que no termina su jornada no para un segundo quieta y que lleva 31 años levantándose a las 4 de la mañana, es la dueña del negocio y con ella trabajan dos camareras y dos cocineros (hombre y mujer) que son como una familia. La jefa rezuma sencillez y asegura que el sueldo es el mismo para todos.
Cinco euros es sin duda un precio bajo para un menú de dos platos, pan, bebida y postre, especialmente en una ciudad en auge como Málaga, donde difícilmente un comensal puede comer por menos de doce euros. Martín recuerda que hace unos pocos años su menú costaba tres euros, pero la pandemia también hizo estragos en este negocio que veía que a ese precio no le salían las cuentas.
La dueña reconoce que con los menús apenas obtienen beneficios y que son los desayunos los que le hacen obtener ingresos. "Tengo el mismo sueldo que mis compañeras, no tengo lujos, vivo de alquiler, tengo una letra de coche y voy al día como ellas", asegura Carmen Martín, que también elabora menús para "gente de la calle" –sin techo- que no tiene dinero para pagarlo.
Desde que este local se ha hecho popular por sus bajos precios, también en la plataforma Youtube –en la que los creadores de contenido “Cenando con Pablo” y “J Dalmau” le dedicaron un vídeo cada uno- más personas han acudido al establecimiento para comprobar la calidad del menú y si sus platos son caseros como presumen.
Además, la propietaria relata que un empresario del estado americano de Wisconsin le ofreció abrir una cafetería en su ciudad y con todos los gastos pagados a ella y su familia, pero rehusó la tentadora oferta para seguir haciendo lo que lleva haciendo 30 años: dar de comer a la gente humilde en su Málaga natal.
Lola, que acude al local por primera vez, cree que encontrar un menú "más barato es imposible" y que debería haber más oferta en la ciudad a este precio porque "la cosa no está para muchos gastos".
María, por su parte, es clienta habitual del bar y sigue yendo porque, a pesar de la subida de precios por la pandemia, el menú "sigue siendo baratísimo".
"Muy bonito, me ha convencido, muy buena gente y voy a repetir. Es estupendo porque es un precio económico para los trabajadores", asegura Jesús, de Melilla, que se estrena en el bar en compañía de unos amigos mientras el resto de comensales degusta este módico menú que difícilmente se puede encontrar más barato en España.