Los vinos monovarietales son aquellos elaborados con una sola uva. Actualmente son usuales en España, pero hubo un tiempo en que en nuestro país se elaboraban únicamente ‘coupages’ de varias uvas, no tantas como en nuestro vecino Portugal, pero sí al menos entraban en juego unas tres variedades distintas. Quizás fuera porque no había más remedio, ya que era habitual que en un mismo pago se encontraran mezcladas distintas familias de uva.Sobre los años 80, cuando se comenzaron a elaborar unos mejores vinos y, sobre todo, a cuidar los cultivos y diferenciar las uvas en distintas parcelas, los bodegueros empezaron a hacer monovarietales. Por una parte defendían sus uvas autóctonas y, por otra parte, abrían nuevos caminos.
Vinos monovarietales de uvas en extinción
A día de hoy, no sólo se elabora con uvas propias de la tierra, sino que algunas bodegas han investigado para recuperar algunos tipos de uva que estaban en franca decadencia y al borde de su extinción.Hemos seleccionado y catado tres vinos monovarietales de calidad y uno de ellos se elabora con uvas recuperadas, una loable labor que amplía aún más el abanico de variedades que tenemos en España, ya de por sí bastante amplio.
1) Evol 2019
B. Elisa Martínez Navarro/ D.O. JumillaPVP recomendado: 12 eurosUn gran vino de autora. Elisa Martínez Navarro, nacida en Jumilla y enóloga, tras 20 años de experiencia en bodegas y con un amplísimo bagaje, decidió comenzar una nueva etapa. Creó Evol, un monovarietal elaborado con monastrell pié franco de viñas viejas. Criado durante dos meses en roble francés de tostado medio, se trata de una edición limitada.
Un vino redondo: incisivo, fresco, con peso en boca y que representa lo mejor de Jumilla. Es un tinto elegante y con temperamento que, para poder apreciar en toda su intensidad, hay que tomar a una temperatura de entre 12 y 14 grados. Hará un buen maridaje con arroces, carnes rojas y, en general, con cualquier guiso condimentado. Posee una excelente relación calidad-precio.
2) Malcorta 2019
Bodegas Javier Sanz/ D.O. RuedaPVP recomendado: 20 eurosUna maravilla de blanco denominado así por el tipo de uva, un clon de la variedad verdejo que estaba en trance de desaparición por la dificultad de vendimiarlo a mano (de ahí su nombre). Javier Sanz recuperó esta uva autóctona de La Seca (Valladolid) y actualmente es la única bodega que comercializa este monovarietal, que está entre los mejores blancos de nuestro país.
Un vino de sello único que es muy mineral, con una acidez potente pero pulida, persistente y aromático. Forma parte de la ‘Colección V’, donde se encuentran los vinos más especiales de la bodega. Perfecto para marisco, guisos marineros, pescados al horno o carnes blancas. Estamos ante un blanco gastronómico que, sabiendo elegir, aguantará toda la comida.
3) Varietal Ondarre Mazuelo 2017
B. Ondarre/ D.O. Ca. RiojaPVP recomendado: 15 eurosBodegas Ondarre ha sacado al mercado este monovarietal elaborado con uva mazuelo, tradicionalmente utilizada en la denominación de origen para ensamblaje por su acidez y color. Han dado un paso adelante con este vino –también han lanzado el 100% graciano-, elaborado con mazuelo de cepas viejas y sólo en añadas seleccionadas (por vendimia temprana).
Una edición limitada a 4.635 botellas de un vino que resulta algo astringente (típico de esta variedad), con un profundo color picota, herbáceo y refrescante en boca. En la bodega han sabido domar esta uva sin perder sus características más genuinas. Por cierto, algunos defienden que es la misma uva que la cariñena mientras otros argumentan lo contrario. Es recomendable decantar antes de servir, porque se embotelló sin estabilización y puede tener posos. Un vino muy original que hará buena pareja con asados y todos aquellos guisos o alimentos potentes en grasas.
