Toda una aventura en la isla más antigua de Canarias, la que primero emergió del mar. Fuerteventura, Reserva de la Biosfera, es aún una gran desconocida en muchos aspectos y, quizás por eso, conservan sus paisajes aún ese aspecto salvaje y sus pueblos ese sello de autenticidad.
La gastronomía comienza a moverse con fuerza en este destino, famoso en el mundo entero, eso sí, por el surf. Hay un movimiento imparable para dar fuerza a la cocina junto a los productos locales de esta isla y la feria gastronómica ‘Paladea’- celebrada en días pasados-, así lo ha demostrado.
Con más de 8.000 visitantes, resultó ser el impresionante escaparate de clases magistrales por parte de cocineros con show cookings, concursos (como el de mojo picón) y ponencias varias, entre otras muchas actividades lúdicas y didácticas.
Cultura gastronómica majorera
Un programa variado y diverso para una feria muy apoyada por la Asociación FuerteGourmet, una organización sin ánimo de lucro que busca difundir la cultura gastronómica majorera y el desarrollo de la cocina, así como poner en valor los productos autóctonos.
Para conocerlos a fondo, nada mejor que acercarse al Mercado de las Tradiciones en el municipio de La Oliva (consultar horarios) donde encontrarás distintas tiendas de alimentación como, por ejemplo, Fimapaire, con las más frescas verduras, desde la curiosa berenjena blanca a las ricas batatas tan consumidas aquí o el famoso tomate canario.
En la tienda María Antigua encontrarás un popurrí de delicias propias de la isla, desde panes artesanales a ahumados, cervezas y una ginebra locales o la sal de Fuerteventura (con calidad de flor de sal, aunque no lo sea)… No faltan los aceites: actualmente poseen 13 almazaras, con la aceituna verdial como una de las más típicas de estas tierras.
Como gran protagonista el famoso gofio, elaborado con cereales tostados, que se añade a numerosos platos y base de su alimentación durante siglos, junto al reconocido queso majorero, de leche de cabra y con Denominación de Origen Protegida. Entre las especias, destaca el ‘azafrán de la tierra’ (Carthamus tinctorius) , obtenido de las flores de cártamo; muy distinto al de la península, es utilizado asiduamente en potajes o mojos.
Carne de cabra estofada
¿Quieres probar una deliciosa carne?. Acércate a La Mamma, una pizzería- asador argentino. Chocante, ¿verdad?, pues te contamos su secreto: además de buenas pizzas, encontrarás unas carnes deliciosas, desde la picaña a un espectacular solomillo al horno. Se encuentra en Corralejo y su propietario, Gustavo Astrada, que lleva ya 42 años asentado en la isla, ha sido uno de los principales impulsores de Paladea.
Los cocineros Gustavo Astrada, a la derecha, junto a Blas Rodríguez.
Si buscas tradición pásate por Casa Marcos, una bonita construcción tradicional de cemento y piedra volcánica, en medio de un espectacular paisaje a los pies de una majestuosa montaña llamada Escanfraga. Su propietario, el reconocido chef Marcos Gutiérrez Vera, muy involucrado también en Paladea, ofrece especialidades basadas en el producto canario como el paté de hígado de cabrito o la carne de cabra estofada, el plato más típico de la isla. Poseen un pequeño hotel.
Pescados autóctonos, marisco, cabrito...
Al norte, en La Oliva, encontramos el restaurante El Horno, en un comedor totalmente típico. Una de sus especialidades es el cabrito asado y, en general, buenas carnes; la garbanzada es un sabroso guiso. Como postre, no te pierdas el gofio en texturas. Posee una agradable zona de comedor en el porche de la casa.
Comedor del restaurante El Horno.
El Roque de los Pescadores, al noroeste de Fuerteventura, está situado cerca del mar y especializado en pescados y mariscos, tan importantes en esta isla. Su cocinero, M’Barek, se basa mucho en el mercado local con preparaciones como los canapés de vieja sobre brioche, carpaccio de gamba de Fuerteventura o pulpo canario con parmentier de patatas canarias y mantequilla de cabra majorera son algunos de sus modernos platos. Tampoco falta el cherne entre las materias primas que utilizan.
Gastronomía y modernidad en Fuerteventura
Platanera, un bonito gastrobar enclavado en Corralejo, es la solución perfecta si quieres conocer un lugar con gran estética, moderno y animado. Eso sí, abre sólo de miércoles a domingo y a las 12 de la noche cierra cual Cenicienta ya que hay unos apartamentos cercanos y pueden molestar.
Merece la pena la visita. Comedores cuidados, un bar perfecto con terraza y vistas para tomar una copa, disfrutar de buena música… y una cocina cuidada y actual. Platos como el tiradito de salmón marinado, el ceviche, el huevo a baja temperatura con pecorino y patatas paja con ibérico o la carrillera al vino tinto son algunas de las preparaciones que ofrecen en carta. Tienen opciones vegetarianas, veganas y libres de gluten. Y una interesante selección de vinos.
Un detalle de la cocina de Platanera.
Bodegas y queserías
No es que haya muchas bodegas en Fuerteventura, pero entre ellas destaca Conatvs que elaboró el primer vino con denominación de origen de la isla. Organizan visitas guiadas donde podrás ver sus cultivos en gabia de jable (muretes de piedra que protegen las cepas de viento) plantadas en tierras volcánicas y elaborados con variedades autóctonas como la baboso negra o diego.
También es buena idea visitar alguna quesería de la isla. Un buen ejemplo es Tindaya, donde elaboran artesanalmente sus quesos a base de leche de cabra de distintas curaciones, al pimentón o el famoso mojogrote (similar al tradicional almogrote, crema queso añejo con pimienta).
Fuerteventura se descubre como un novedoso destino gastronómico donde encontrar producto y originales restaurantes.