El cabecilla del grupo es José Ángel Prenda; el más joven del grupo, Ángel Boza, es el que se mostró más afectado en el juicio. Antonio Guerrero, junto al Prenda, A Alfonso Jesús Cabezuelo y Jesús Escudero, están imputados asimismo, en una pieza derivada del caso de los sanfermines, por una supuesta agresión sexual a una chica de Pozoblanco