La canciller alemana, Angela Merkel, anunció este martes que el Estado dejará de costear los test de coronavirus para las personas no vacunadas a partir del 11 de octubre.
La decisión fue adoptada por consenso en la reunión virtual que Merkel celebró con los jefes de gobierno de los 16 estados federados, en la que además se adoptaron otras medidas para controlar la evolución de la pandemia en Alemania, donde los nuevos casos repuntan a la vez que cae el ritmo de vacunación.
El documento de conclusiones explica que para el 11 de octubre todas las personas en Alemania habrán tenido la posibilidad de vacunarse dada la oferta actual de dosis en el país. De la norma quedan excluidos los menores de 18 años y las personas con contraindicaciones médicas.
En el encuentro también se acordó que los test serán obligatorios en interiores y en grandes actos a partir de una incidencia acumulada local de 35 casos por cada 100.000 habitantes en siete días. La incidencia acumulada nacional se situó este martes en los 23,5.
En los acontecimientos deportivos con más de 5.000 espectadores se permitirá hasta un 50 % del aforo máximo, con un tope de 25.000 personas.
Las medidas de seguridad, como el uso de mascarillas en espacios públicos cerrados o concurridos, así como el distanciamiento, seguirán vigentes y se revisarán cada cuatro semanas.
"Medidas leves"
Se trata, argumentó la canciller, de "reaccionar con medidas leves" a la evolución de la pandemia, para tratar de "evitar medidas dramáticas". Las autoridades se centran ahora en "ralentizar la evolución" del coronavirus y de promover la vacunación".
De hecho, Merkel tachó de "mala noticia" la caída del ritmo de vacunación en las últimas semanas, algo que atribuyó al período vacacional, y esperó que la demanda aumente con el inicio del curso escolar.
Merkel recalcó que las restricciones sanitarias no van a aplicar a las personas completamente inmunizadas (vacunados y recuperados de la enfermedad).
La canciller también explicó que, debido al efecto de la campaña de vacunación, se van a empezar a contemplar más variables además de la incidencia acumulada a la hora de adoptar restricciones.
La carga sobre el sistema sanitario es ahora menor que antes para la misma incidencia acumulada porque hay una mayor proporción de vacunados, indicó.
Merkel indicó que el 80% de las personas de más de 60 años se han recibido la pauta de vacunación completa, pero consideró que lo "ideal" sería que más del 90% de esa cohorte de edad se vacunase y que la inmunización en el conjunto de la población superase el 75%.
"Necesitamos un incremento claro. Es precisa una mayor protección" de la cuota de vacunación, reconoció la canciller.
El Instituto Robert Koch (RKI) de virología comunicó este martes 2.480 nuevos casos en las 24 horas previas, así como 19 muertes con o por coronavirus. Alemania acumula así 3.794.429 positivos y 91.803 muertes.
Según el Ministerio de Sanidad, hasta este lunes un 62,5% de la población (52 millones de personas) había recibido al menos una dosis de la vacuna contra la covid y al 55,1% (45,8 millones) se le había administrado ya la pauta completa.