Mientras la nueva presidenta de México y su predecesor continúan centrando sus esfuerzos en que España pida perdón por el periodo virreinal de Nueva España, la violencia continúa manchando las calles del país norteamericano. El regidor de la ciudad de Chilpancingo, Alejandro Arcos, quien había asumido el cargo hace menos de una semana, ha sido asesinado y decapitado este domingo en la localidad, situada en el estado de Guerrero en el suroeste del país. Sus asesinos dejaron su cadáver decapitado expuesto en un vehículo con la cabeza en el techo del mismo. Este episodio de violencia sucede apenas unos días después de que el secretario general de Ayuntamiento también fuera asesinado.
El homicidio de Arcos ha sido denunciado por su partido, el Partido de la Revolución Democrática (PRD), cuyo presidente, Jesús Zambrano, ha defendido que lo sucedido es "una muestra más de la ausencia de gobernabilidad" en el estado de Guerrero, que se encuentra "claramente en manos de la delincuencia".
"Además de enviar nuestra sentida solidaridad a su esposa, familiares y amigos, le exigimos a Claudia Sheinbaum tome directamente en sus manos el esclarecimiento y castigo de este asesinato político en este narcoestado sureño", ha señalado en su cuenta en la red social X (antes Twitter), dirigiéndose directamente a la nueva presidenta mexicana.
La gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, ha publicado un comunicado condenando "de manera enérgica" el asesinato de Arcos. "Su pérdida enluta a toda la sociedad guerrerense y nos llena de indignación", ha señalado, antes de destacar que ha dado orden de "intensificar los operativos de vigilancia y proximidad social en diversos puntos de Chilpancingo".
"Al pueblo guerrerense le reitero el compromiso de mi gobierno de trabajar en coordinación con las autoridades de los distintos órdenes de gobierno para garantizar la paz y la gobernabilidad en Guerrero, procurando avanzar siempre hacia la pacificación de nuestro estado", ha insistido.
La Fiscalía General de Guerrero ha anunciado una investigación en torno al suceso y ha manifestado que agentes se acercaron al lugar de los hechos para comenzar con las pesquisas de los hechos y "llevar a cabo los actos de investigación correspondientes, que permitan obtener datos de prueba necesarios para esclarecer el ilícito".
"La Fiscalía General del estado de Guerrero refrenda su compromiso con las y los guerrerenses de procurar el acceso a la justicia y el combate a la impunidad", ha señalado a través de un comunicado, pero no han destacado si ya ha habido detenciones relacionadas con el asesinato.
Según las informaciones recogidas por el diario mexicano 'La Jornada', el cadáver de Arcos fue hallado después de que las autoridades recibieran una denuncia sobre la presencia de restos humanos en un vehículo en la colonia Villa del Roble.
Fuentes de seguridad citadas por este medio han detallado que la cabeza del alcalde fue localizada en el techo de una camioneta blanca, mientras que el cuerpo estaba en el interior de este mismo vehículo, cubierto con una sábana.
El suceso tiene lugar apenas unos días después del asesinato del secretario general del Ayuntamiento de Chilpancingo, Francisco Gonzalo Tapia, quien fue tiroteado por una persona no identificada cuando caminaba por el centro de la ciudad. Chilpancingo lleva años siendo escenario de un enfrentamiento entre varias bandas criminales que se disputan el control de varios municipios en Guerrero, lo que ha derivado en un aumento de la violencia que se ha saldado con cientos de asesinados.