Los bomberos ucranianos que se enfrentan a los incendios registrados en la zona de exclusión de Chernóbil desde hace tres días se están viendo sometidos a un nivel de radiación 16 veces por encima de lo normal, según las autoridades medioambientales del país.
En plena pandemia de coronavirus, cerca de 25 hectáreas de bosque en la zona casi deshabitada donde tuvo lugar la catástrofe nuclear en 1986, la radiación ha aumentado en la región por los incendios forestales, que han provocado una nube de humo que afecta ya a la capital, Kiev.
Tal y como ha indicado en un breve comunicado el Servicio Estatal de Emergencias, por el momento no hay víctimas, si bien un cuarto de las llamas se encuentran en la zona de Chernóbil. Dicho incendio se habría expandido a un área de más de 100 hectáreas a lo largo del fin de semana.
Los incendios se produjeron a raíz de la quema controlada llevada a cabo por agricultores de la zona
Las autoridades consideran que el principal foco de los incendios -la mayoría de ellos registrados en la provincia de Kiev- se produjo a raíz de la quema controlada llevada a cabo por agricultores de la zona. No obstante, el Gobierno ha puesto en marcha una investigación al respecto.
El desastre nuclear de 1986
El accidente nuclear de Chernóbil, que tuvo lugar el 26 de abril de 1986 cuando se produjeron varias explosiones y un incendio generalizado en la planta nuclear Vladimir Ilich Lenin, es considero el mayor desastre nuclear de la historia.
Las autoridades ucranianas comenzaron a permitir el acceso de turistas a la zona en 2011, cuando los niveles de radiación fueron considerados "permisibles". En 2019, Ucrania registró el mayor número de turistas en la zona de exclusión de Chernóbil, cerca de Bielorrusia, con 100.000 visitantes.