La directora del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, fue imputada por "negligencia" tras haber sido interrogada durante varias horas en relación con una investigación por presunta corrupción, según han indicado a la agencia Efe fuentes judiciales.
Preguntada por la agencia de noticias francesa AFP si tenía la intención de dimitir del FMI, la exministra de Economía ha respondido con un contundente "no." "Vuelvo a trabajar a Washington esta tarde," ha apostillado.
Lagarde declaró este martes durante 15 horas ante la Corte de Justicia de la República, instancia habilitada para juzgar a los ministros por delitos cometidos durante su estancia en el Gobierno, que ya ha interrogado a la exministra en cuatro ocasiones. Sin embargo, hasta ahora no había dado el paso de imputarla y se mantenía con el estatus de "testigo asistido".
A partir de ahora, Lagarde ha dado un paso más en su implicación en esta investigación, que persigue determinar si hubo corrupción en la atribución de una indemnización de 403 millones de euros al empresario Bernard Tapie en 2007 por la venta de la empresa de equipamiento deportivo Adidas en los años 90.
Confiscada a Tapie, esa empresa fue vendida por el banco Crédit Lyonnais por un precio muy inferior al de mercado, según Tapie, que reclamaba al Estado una indemnización. Tras años de litigio, Lagarde, ministra de Economía en el Gobierno del conservador Nicolas Sarkozy entre 2007 y 2011, antes de su llegada al FMI, decidió que fuera un arbitraje privado el que fijara la indemnización.
El hecho de que no fueran los tribunales los que calcularan el monto de la indemnización provocó que se abriera una investigación judicial por presunta corrupción. Cinco personas han sido acusadas en este sumario por los jueces instructores, entre ellos el empresario y exministro Tapie -conocido por su amistad con Sarkozy- y el anterior director del gabinete de Lagarde en el departamento de Economía, Stéphane Richard, actual presidente del operador de telecomunicaciones Orange.