No parece que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, vaya a poner fácil su eventual salida de la Casa Blanca. Tras un discurso la noche electoral asegurando que ya había ganado cuando aún el recuento estaba en marcha, la madrugada de este viernes ha sido censurado por los medios estadounidenses, incluso de las televisiones afines a su partido.
El líder republicano y aún aspirante a ser reelegido para la Presidencia de Estados Unidos -aunque cada vez más lejos de conseguirlo- ha comparecido esta madrugada ante los medios para cuestionar, como ha venido haciendo los últimos días, la integridad del sistema electoral del país.
Trump ha puesto entredicho, sin argumentarlo con ninguna prueba, la legalidad de los millones de votos de ciudadanos estadounidenses en las elecciones presidenciales de este 2020. Además, pretende comenzar un largo litigio sobre los resultados de estos comicios.
La de la pasada noche ha sido su primera intervención después de la que hizo durante la noche electoral, donde ya aseguró que recurriría el proceso ante el Tribunal Supremo, donde los jueces conservadores son la mayoría -la última jueza que 'colocó' el magnate fue hace apenas unos días-.
El mandatario norteamericano ha hecho una declaración a la prensa -sin permitir preguntas de los periodistas- en la que las informaciones falsas sobre la legitimidad del proceso han sido protagonistas. Además, no ha ofrecido ninguna prueba sobre las duras y graves acusaciones.
En concreto, Trump ha hablado de corrupción contra oficiales de estados clave como Michigan y Pensilvania, el segundo aún con el recuento de votos en marcha.
"Es un sistema corrupto y hace que la gente se corrompa", ha dicho para continuar afirmando que los comicios se están amañando a favor de la "corrupta máquina demócrata". Trump ha insistido en que se está cometiendo un "fraude", algo que ha reiterado tanto en persona como en las redes sociales.
Están tratando de amañar unas elecciones y no podemos dejar que eso ocurra", volvió a asegurar Trump
"Están tratando de amañar unas elecciones y no podemos dejar que eso ocurra (...) Nuestro objetivo es defender la integridad de las elecciones, por lo que no permitiremos a los corruptos que nos roben", ha añadido para insistir en que no se deben tener en cuenta votos recibidos después del 3 de noviembre, jornada electoral.
Insiste en que ganará "fácilmente"
El magnate ha continuado afirmado que ganará "fácilmente" la reelección, pero que "habrá muchos litigios" en varios estados clave, y que algunos de ellos podrían acabar en la Corte suprema de Estados Unidos, de mayoría conservadora.
No solo eso, Trump ha rescatado su habitual guerra personal contra los medios de comunicación, aseverando que ha habido una "interferencia histórica en las elecciones por los grandes medios de comunicación, grandes donantes y grandes tecnológicas".
Estas declaraciones han provocado que algunas de las principales cadenas de televisión del país, como 'ABC', 'CBS' y 'NBC', cortasen al unísono la intervención del actual presidente, un discurso que se estaba desarrollando en horario de máxima audiencia.
No obstante, no solo los tres grandes canales en abierto del país cortaron las palabras del magnate, sino que Fox News, la referencia informativa del Partido Republicano y abiertamente afín a su política y, hasta ahora, a su candidato, desmentía las palabras de Trump.
Ruptura con Fox News
Lo cierto, es que la ruptura entre el republicano y el canal de noticias conservador se está haciendo cada vez más evidente, impulsada por la insistencia del inquilino de la Casa Blanca en que está habiendo fraude electoral, algo de lo que también se están desligando muchos dirigentes republicanos.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) November 6, 2020
"No hemos visto nada que constituya un fraude o un abuso del sistema", aseguraba el corresponsal de la Casa Blanca para Fox News, John Roberts, en directo desde la misma sala de prensa en la que intervino el presidente. En el plató de informativos, los presentadores repetían una y otra vez: "No hemos visto ninguna prueba".
Otros medios como 'The Washington Post', 'The New York Times' y 'Los Ángeles Times' también desmintieron al dirigente republicano.