El secretario del Tesoro, Jacob Lew, urgió este jueves al Congreso a aumentar el endeudamiento autorizado de Estados Unidos y advirtió de que el gobierno "ya está en los descuentos" y empleando medidas de emergencia para pagar sus compromisos. "Éste es un momento importante en la historia del país y el Congreso tiene que tomar una decisión importante para los estadounidenses", señaló Lew en un testimonio ante el Comité de Finanzas del Senado.
"Sólo el Congreso tiene la autoridad para actuar y asegurar que jamás haya dudas sobre el crédito pleno de EEUU", añadió. "Ningún Congreso en doscientos veinticuatro años de historia ha permitido que nuestro país cese sus pagos". Según el Gobierno del presidente Barack Obama, EEUU llegará alrededor del 17 de octubre al límite de endeudamiento autorizado por el Congreso y, si no hay una extensión de límite incurrirá en el cese de pagos, algo que funcionarios, políticos, economistas e inversores describen como catastrófico.
Una facción de las filas republicanas, que tiene la mayoría en la Cámara de Representantes y es la culpable de la parálisis parcial de la Administración federal desde el 1 de octubre, se opone al aumento de la deuda y condiciona su voto a que se prive de fondos la reforma sanitaria promulgada por Obama en 2010. Algunos políticos de esa facción, conocida como 'Tea Party', sostienen que el Gobierno exagera las consecuencias posibles de un cese de pagos, y ponen en duda que Estados Unidos ya no tenga dinero para seguir atendiendo sus obligaciones.
En la apertura de la interpelación el senador demócrata Max Baucus, de Montana, sostuvo que "por más de doscientos años EEUU ha cumplido con su palabra y sus obligaciones, y ha pagado sus deudas". "Hoy, un pequeño grupo de intransigentes usa nuestra economía como ficha para negociar un repudio de la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio", denunció Baucus, para añadir que "no permitiremos que eso ocurra".
Por su parte, el senador republicano Orrin Hatch, de Utah, apuntó que "han habido siete incrementos de la deuda desde que el presidente (Obama) llegó a la Casa Blanca, que ha pasado de 11,3 billones de dólares a 16,7 billones de dólares, un aumento acumulado de 5,4 billones de dólares".
"El monto de la deuda equivale al 107% de la economía de Estados Unidos". "Y esto representa enormes riesgos económicos y fiscales", apuntó Hatch.
Lew también criticó las propuestas de los republicanos para autorizaciones parciales de gastos que permitan el retorno al funcionamiento de ciertas áreas del Gobierno Federal y sostuvo que "éstas son elecciones peligrosas entre pagar a los veteranos de guerra o a los jubilados".