La toma de posesión de la presidenta electa mexicana, Claudia Sheinbaum, ha estado marcada por la polémica con España al no invitar al acto, celebrado a princpios de octubre, al rey Felipe VI por negarse a contestar una carta del anterior presidente, López Obrador, en la que exigía disculpas por el pasado colonial español en el país.
La respuesta del Gobierno de España fue no enviar representación al acto, mientras que el propio monarca ha contestado a esta polémica: "Los iberoamericanos somos una unidad en la diversidad".
Ahora, Sheinbaum ha tomado, durante sus primeros días de gobierno, una paradójica decisión: nombrar al general Hernán Cortés, general de brigada diplomado del Estado Mayor de México, como Comandante Interino de la Guardia Nacional.
Este nombre resulta ahora irónico en bocade Sheinbaum después del rifirrafe con España tras exigir "ponerse de acuerdo en una disculpa pública por las atrocidades cometidas durante la Conquista española".
Hernan Cortés fue un militar español que lideró la Conquista de México durante el siglo XVI, tomando la ciudad de Tenochtitlán y poniendo fin al Imperio azteca.
