Marruecos cerrará su Embajada en Argelia y repatriará a sus principales representantes diplomáticos, incluido el embajador, en respuesta al ruptura de relaciones decretada esta misma semana por el país vecino, que denunció "actos hostiles" por parte de Rabat.
El cierre de la Embajada se hará efectivo a partir de este viernes, según fuentes citadas por el portal 'Le360', un medio considerado cercano al rey Mohamed VI. No obstante, permanecerán abiertos los consulados marroquíes en Argel, Orán y Sidi Bel Abbes.
El Ministerio de Exteriores de Marruecos ya había tachado de "injustificada" la ruptura de relaciones, que agrava el pulso político que venían librando los dos países vecinos en estas últimas semanas y que no logró aplacar Mohamed VI con un discurso a principios de mes.
"Pretextos falaces"
Rabat rechazó "categóricamente los pretextos falaces, incluso absurdos, que subyacen a la decisión de Argel", si bien manifestó su intención de seguir "siendo un socio creíble y leal para el pueblo argelino". "Marruecos seguirá actuando, con sabiduría y responsabilidad, para el desarrollo de relaciones intermagrebíes saludables y fructíferas", alego en su nota.
El Gobierno argelino había basado su decisión en una serie de agravios que iban desde la falta de avances en la resolución del conflicto del Sáhara Occidental, el apoyo de Rabat a movimientos separatistas o las críticas pronunciadas por el ministro de Exteriores de Israel durante una visita oficial a Marruecos.