La Fiscalía de Panamá llevó a cabo en la tarde de este martes un registro en la sede central de la firma de abogados Mossack Fonseca, con el propósito de "obtener documentación que guarde relación con las informaciones publicadas que establecen la posible vinculación de la firma con actividades ilícitas".
La Procuraduría panameña ha informado a través de un comunicado de que la recién creada Fiscalía contra la Delincuencia Organizada realiza "la diligencia de allanamiento, inspección ocular y registro", que se ha ejecutado de forma simultánea en el centro de datos de la empresa que le brindaba el soporte informático.
Según informa el diario local La Prensa, el personal de la firma no estaba "colaborando con el fiscal" Javier Caraballo, tratando de "dilatar" el proceso, por lo que la PGN tomó la decisión de acceder a las oficinas en busca que documentos que aceleren las investigaciones. Durante el registro, que se ha prolongado hasta las 2:00 horas locales del miércoles, varios vehículos de la Policía Nacional han permanecido frente al edificio donde se ubican las oficinas, mientras que varios grupos de agentes se han situado en otros lugares cercanos.
En el operativo también han participado funcionarios del departamento de Informática Forense del Instituto de Medicina Legal, así como personal de la sección de Análisis Financieros de la Dirección de Investigación Judicial (DIJ), según agrega el citado periódico.
A raíz del registro, el bufete de abogados ha asegurado en su cuenta en Twitter que sigue "cooperando con las autoridades en las investigaciones que se están realizando en nuestra casa matriz". En un comunicado recogido por los medios locales, "en este caso, el único crimen cometido ha sido en contra de nosotros". "Nuestro sistema fue infringido ilegalmente por personal externo a la empresa", ha insistido Mossack Fonseca.
Por otra parte, La Prensa también ha informado que desde el lunes la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV) está efectuando una inspección especial en Mossfon Asset Management, la empresa de asesoría financiera que forma parte de Mossack Fonseca. El objetivo es comprobar que la firma lleva a cabo la debida verificación del origen de los fondos de sus clientes y si conoce los beneficiarios finales de las empresas que asesora, ha precisado el diario.